MADRID, 25 May. (Por Irene Díaz) -
Ella sigue cada día más volcada en el mundo del diseño de la moda. Después de celebrar once años de matrimonio con Javier Merino, la ex modelo y actriz, no necesita que nadie le diga cómo vestir, pues siempre con su elegancia sabe colocarse entre las mejores de cada evento.
No es de extrañar así que ahora esté al mando de su propio blog de moda y se plantee más proyectos relacionados con el mundo del diseño, eso sí, aún son todo un misterio sin resolver por la protagonista.
Mar Flores, que cumple cuarenta y tres años el próximo 11 de junio, disfruta de este momento que define como maravilloso y pleno, cosa que parece sorprenderle a su edad. La modelo y actriz y su marido, el empresario Javier Merino, siguen tan enamorados como el primer día y hacen alarde de ello allá por donde van. Sus cuatro hijos, no dejan de ser un fruto perfecto de este amor.
- ¿Te animarías a escribir un libro basándote en tu experiencia en el mundo de la moda?
- De momento soy bloguera. Dicen que en esta vida hay que plantar un árbol, escribir un libro y tener hijos. Yo casi, casi he cumplido.
- ¿Qué carácter te gusta imprimirle a tu blog?
- Desenfadado, divertido, natural... Yo creo que un poco como soy yo y sobre todo muy fresco.
- Si hablamos de la elegancia siempre sueles estar en ese Top Ten, ¿qué hay que tener para ser elegante?
- La elegancia es una actitud, un saber estar. No es tanto seguir la moda a rajatabla como saber qué te favorece y vestir adecuada al momento.
- ¿Cuál crees que es la mujer más elegante de España y por qué?
- Creo que en España hay muchas mujeres que son elegantes, un buen referente es la Condesa de Romanones, Aline Griffith. Quien sabe de elegancia realmente es ella.
- ¿Qué planes tienes este verano?
- Me voy a Ibiza, como siempre, y espero que sea en muy poco tiempo.
- ¿Sigues con tus proyectos de diseño? ¿Cuál será tu próxima sorpresa?
- Sigo con mis proyectos, pero hasta que no los tenga no los cuento.
- ¿Cómo definirías el momento en el que te encuentras?
- Fantástico, la verdad, estoy muy contenta. No me creo lo feliz y lo completa que puede estar una mujer siendo tan mayor como yo (risas).
