LOS ANGELES, 3 Nov. (EUROPA PRESS - Sandra del Caño Morales) -
Ella es la diva del glamour y el estilo. Si hay que elegir entre todas y quedarse con solo una trendsetter mundial, esa sería sin lugar a dudas la protagonista de 'Sexo en Nueva York'. Siempre consigue llamar la atención mediática gracias a sus originales atuendos y, esta vez, lo ha vuelto a hacer. Pero no solo con uno, sino con tres looks.
Desde que se hizo con el papel de Carrie Bradshay en 'Sexo en Nueva York', Sarah Jessica Parker se ha convertido en todo un referente de moda. Y es que esta actriz se atreve con todo y en sus últimas apariciones la hemos vuelto a ver arriesgando en estilo.
En el primero de los casos la vimos lucir un espectacular vestido bicolor -blanco y lila- en el que el cuerpo estaba confeccionado con lentejuelas, un fino lazo de terciopelo negro entallaba su cintura, de la que salía una falda plisada hasta la altura de la rodilla.
La melena al viento con sus habituales rizos salvajes marcados a partir de unos centímetros de raíz, más unas sandalias y un bolso de mano negros, completaban la primera elección de Sarah para el día.
SARAH JESSICA PARKER, DIVINA CON UNA PAMELA A LO LADY GAGA
Momentos más tarde la veíamos aparecer en el Crown Palladium de Melbourne con un look de lo más atrevido y original. El vestido era una apuesta elegante con tweed, típico de Chanel, en tonos tierra y abotonado por delante.
Escote halter cerrado, cortes muy rectos y bastante ajustado, el traje entallaba la espléndida figura que Parker continua luciendo a su edad. Un par de Manolo Blahnik en negro terminaban de aportar la sofisticación y sobriedad al atuendo.
Pero, lo mejor estaba por llegar. La actriz decidió colocarse en lo alto de su cabeza una gigantesca pamela con forma imposible, al más puro estilo Lady Gaga, firmada por Philip Treacy. El mismo diseñador que creó el horrible tocado que la princesa Beatriz de York lució en la boda real británica.
Aunque, en una estrella de la talla de Sarah Jessica Parker, la cosa cambia.
SARAH JESSICA PARKER SE DESPIDE CON LOOK CUENTO DE HADAS
Finalmente, y aunque no en el mismo día pero sí uno más tarde, la protagonista de 'Sexo en Nueva York' decidió nuevamente captar todos los flashes y volver a dar una lección de moda.
Para esta ocasión, Sarah eligió un look muy princesita formado por vestido rosa palo que acaba degradándose al blanco con casi inadvertidos bordados de amebas y flores.
El toque glam lo obtuvo con un trench plateado que llevaba abierto para dejar ver el vestido. Unos salones de punta color crema y un collar de perlas completaban su outfit más romántico.
Sin embargo, lo más llamativo fue el fantástico recogido de la actriz.
