MADRID, 1 Ago. (CHANCE) -
La familia Real aterrizó ayer en Mallorca para comenzar su vacaciones públicas de manera oficial en la isla. Don Felipe, doña Letizia, Leonor y Sofía se instalaban el sábado en el palacio de Marivent tras una semana marcada por la triste pérdida de la abuela paterna de la reina, Menchu Álvarez del Valle.
Esta misma mañana, en la víspera del arranque la 39 edición de la Copa del Rey Mapfre de vela, el Rey ha inaugurado la temporada de navegación. Con mucha disposición se ha dirigido a la estación militar de Porto Pi donde le esperaba la embarcación de la armanda AIFOS, con la que compite todos los años.
Don Felipe ha tenido un recibimiento muy cariñoso por todos lo miembros de la tripulación que aguardaban la llegada del Jefe del Estado a bordo. Lo que ha llamado la atención es la notable ausencia de su familia una vez más. Ni su mujer ni sus hijas han acompañado a don Felipe a puerto para despedirse de él, como ha ocurrido en ocasiones anteriores.
Alrededor de las doce y media de la mañana, el Rey ha subido a bordo de la embarcación para realizar los entrenamientos previos a la competeción. Don Felipe se ha mostrado muy sonriente y emocionado al poder seguir practicando una de sus pasiones, la vela.
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