MADRID, 26 Jul. (CHANCE) -
Mónaco se vistió de gala este pasado sábado 25 de julio para celebrar el discreto enlace civil entre Pierre Casiraghi y Beatrice Borromeo. La joven pareja hizo que el principado volviese a celebrar un evento especial de sus monarcas, aunque no fue el único.
Y es que tras la boda real, el príncipe Alberto II de Mónaco y la princesa Charlene acudieron al Baile de la Cruz Roja. Y es que la agenda real prima antes que la personal y la feliz pareja tuvo que abandonar la celebración de la boda de su sobrino para atender este acto.
Si el año pasado Charlene lucía orgullosa el embarazo de sus mellizos, los pequeños Jacques y Gabriella, en esta ocasión y como una mamá orgullosa y recuperando la figura, no ha dudado en calzarse un jumpsuit en rojo pasión. Por su parte, Alberto de Mónaco ha lucido el elegante esmoquín con americana blanca, la etiqueta ideal para un evento como este.
Organizado la Sociedad de los Baños del Mar (SBM), más de 800 invitados se han dado cita en este evento tan glamuroso y uno de los más importantes de la sociedad monegasca. Como no, los príncipes no defraudaron y nos brindaron como siempre instantáneas de lo más dulces, compartiendo miradas cómplices y también el baile inaugurado por ellos mismos.
