MADRID, 3 Mar. (CHANCE) -
Fiel a una tradición de la Familia Real con más de 300 años de historia, la Reina Sofía ha visitado la Basílica del Cristo de Medinaceli - en el centro de la capital, entre la plaza de Neptuno y el Congreso de los Diputados - para asistir al multitudinario besapiés de la imagen de Jesús Nazareno Rescatado, que se celebra el primer viernes de marzo y que cuenta con miles de devotos tanto en Madrid como en toda España.
La Reina Emérita ha cumplido con la tradición y, en torno a las 13.00 horas, llegaba al templo, recibiendo los aplausos y los 'vivas' de las personas que hacían cola para venerar al Cristo. Un cariño que la madre de Felipe VI ha correspondido con una gran sonrisa antes de besar el pie izquierdo del Cristo.
Todavía de luto tras la muerte el pasado 10 de enero de su hermano Constantino de Grecia, Doña Sofía ha lucido un look sobrio, con pantalón de pinzas, blusa, botines de tacón bajo - como en ella es habitual - y bufanda para protegerse de las bajas temperaturas en color negro, y abrigo tipo trench con rayas blancas en el mismo tono que el resto del conjunto.
Esta ha sido la segunda aparición pública de la Reina después de asistir, el pasado 18 de febrero en Atenas, al funeral en memoria de su querido hermano. El 22 de febrero presidía la entrega de los Premios Iberoamericanos de Mecenazgo de la Fundación Callia en la Real Academia de Bellas Artes, y aunque en dicha ocasión 'abandonó' el luto para lucir una blusa de seda en color champán, este viernes ha elegido un total look en negro.
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Además de a Doña Sofía, también se ha visto en el tradicional besapiés al alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, que también ha recibido el cariño de los fieles que aguardaban a las puertas de la Basílica para poder venerar al Cristo de Medinaceli.
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