MADRID, 20 Ago. (CHANCE) -
Una Sagrada Familia blindada por las fuerzas de seguridad e intacta a pesar de haber sido objetivo de los terroristas en los últimos meses, ha acogido esta mañana una misa por la paz, por la recuperación de los heridos y en memoria de las víctimas de los terribles atentados ocurridos en Barcelona y Cambrils(Tarragona).
Al solemne acto han acudido Los Reyes y numerosos responsables políticos: El presidente español, Mariano Rajoy; la vicepresidenta, Soraya Sáenz de Santamaría; el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont; la alcaldesa de Barcelona y la alcaldesa de Cambrils, Ada Colau y Camí Mendoza respectivamente. Además, miles de personas anónimas han acudido a la Sagrada Familia por solidaridad, como protesta por los atentados y para "plantar cara a los terroristas".
La emotiva misa ha estado oficiada por el cardenal arzobispo de Barcelona, Juan José Omella, quien nos ha enviado un mensaje muy claro: Unidad. Omella ha calificado a la sociedad entera de "artesanos de la paz" y ha destacado que "nuestro objetivo común debe ser "la fraternidad, el respeto y el amor solidario". El acto además ha contado con la presencia de representantes de otras confesiones religiosas como la musulmana y el cardenal ha transmitido este mensaje ante todos y para toda la humanidad y todas las religiones: “la unión nos hace fuertes y la división nos corroe y nos destruye”.
Tras este atentado, Barcelona, España, Europa, y el mundo entero, está demostrando su solidaridad con las víctimas y han sido admirables los gestos de muchísimas personas y empresas que no han dudado en ayudar a los afectados en lo que han podido demostrando que como dice Omella la unión es lo más importante tras sucesos tan terribles como estos.
