6 consejos para cuidar la espalda de los niños

   MADRID, 26 Sep. (CHANCE) -

   Con la vuelta al cole, cada año se reabre el polémico debate sobre el peso en las mochilas de los niños, las posturas adecuadas a la hora de sentarse en los pupitres, en definitiva, la necesidad de mantener una correcta higiene postural.

   Las lesiones más frecuentes en los niños suelen estar relacionadas con las malas posturas que van adoptando durante su crecimiento, el coger pesos inadecuados o también puede tratarse de lesiones hereditarias. Los casos más comunes que nos encontramos son la escoliosis o desviación de columna, en concreto, la escoliosis idiopática, es decir, la de origen desconocido; aunque puede aparecer a cualquier edad, se suele asociar al crecimiento a partir de los 10 o 12 años.

   La carga de peso sobre la columna es factor determinante, dado que la musculatura de los niños todavía es débil y no está preparada para aguantar mucha carga. A todo ello hay que sumar la práctica de deportes de forma incorrecta, de ahí la necesidad de incorporar los estiramientos para evitar desequilibrios musculares y esto es algo que nos debe preocupar como afirma Álvaro Herrera, coordinador del servicio de rehabilitación del Hospital Vithas Nuestra Señora de América. PAUTAS DE PREVENCIÓN PARA CUIDAR LA ESPALDA DE LOS NIÑOS

   1.La principal medida va ligada a una buena formación dirigida a los padres y a los propios niños, ya que es la mejor manera de instaurar los hábitos y posturas saludables en sus actividades cotidianas.

   2.Las mochilas que se recomiendan son aquellas que contengan varias sujeciones: en hombros, cintura y zona del pecho, para así distribuir la carga, pero fundamentalmente las mochilas con ruedas o carritos.

   3.La postura correcta a la hora de sentarse en los pupitres resulta determinante. Ha de ser con la espalda totalmente apoyada sobre el respaldo de la silla.

   4.Siempre es aconsejable estudiar o hacer los deberes en los lugares destinados a ello, como son las mesas de estudio y las sillas que están correctamente adaptadas a la postura del niño.

   5.Practicar deportes que sean muy completos y nada dañinos, como por ejemplo la natación y el pilates terapéutico. En general, cualquier tipo de deporte es aconsejable, siempre que se ejecute con una correcta preparación.

   6.Conviene realizar revisiones periódicas con Traumatología y establecer, con la supervisión de un fisioterapeuta, ejercicios funcionales terapéuticos para que el niño coja un buen hábito de salud e higiene corporal.

   Estos seis consejos son primordiales a la hora de evitar cualquier problema por pequeño que sea en la espalda de los más pequeños de la familia.