MADRID, 26 Nov. (CHANCE) -
Los tiempos han cambiado y los verdaderos referentes de los niños ya no son los deportistas de elite, las actrices de Hollywood o el cantante de su grupo de música favorito. Ahora en quienes se fijan cada día más y fantasean con ser como ellos es en los llamados influencers.
¿QUIÉNES SON LOS 'INFLUENCERS'?
Pero, ¿qué es un influencer? Según el diccionario de marketing 40defiebre, "es una persona que cuenta con cierta credibilidad sobre un tema concreto, y por su presencia e influencia en redes sociales puede llegar a convertirse en un prescriptor interesante para una marca", aunque otros portales especializados como InboundCycle lo definen como "una persona que, de algún modo, ha logrado destacar en los canales digitales, especialmente en las redes sociales, como Facebook o Instagram, así como en plataformas de vídeo como YouTube".
Unos nuevos iconos, que muchos padres y madres rechazan para sus hijos por un miedo, en ocasiones, provocado por mero desconocimiento de lo que hacen, pero que gusta mucho a las nuevas generaciones.
"Los influencers están aquí para quedarse. Esto no es una moda, es una realidad. Es algo tan novedoso que genera miedo a lo desconocido y no hay que tenerlo", explica Rodrigo Ron, experto en comunicación infantil y periodista además de CEO y fundador de El Chupete, una institución independiente que promueve la comunicación infantil responsable e incentiva la creatividad en los niños.
"Podemos tener cantantes, actores y deportistas que son un mal ejemplo, al igual que en los influencers, pero eso no quiere decir que todos lo sean", explica Ron y añade que el influencer "no se distancia mucho de lo que puede ser que un chaval que desde muy jovencito empiece a cantar, o a jugar al fútbol o empiece a actuar. Lo que pasa es que nos resulta más llamativo y más novedoso, porque lo puede hacer desde su casa".
Continuando con su explicación, el CEO de El Chupete recomienda a esos padres temerosos que se adentren dentro de ese mundo en el que se encuentran sus hijos para conocerlo de primera mano, y así evitar que se convierta en algo que les separe y abra una brecha generacional entre ellos, "Es importante estar alerta, pero una cosa es estar alerta y otra, dramatizar de manera gratuita. Lo que hay que hacer es ponerse las pilas para conocer el mundo digital, conocer cómo hacen para llegar al público y de esa manera será más sencillo tutelar a sus hijos". Y añade: "Tenemos dos posibilidades: una es prohibir y la otra, es educarnos a nosotros mismos en el uso de los dispositivos y en el uso de este tipo de actores como son los influencers".
SER 'INFLUENCER' NO ES TAN FÁCIL COMO PARECE
Como asegura Rodrigo Ron, no todo el mundo vale para ser influencer, "El número de likes o el número de seguidores se puede comprar, lo que no puede comprar es tu capacidad de generar contenido interesante, ahí es donde está el verdadero influencer", y afirma que, aunque parezca que es una manera fácil y rápida de ganar dinero, por detrás hay mucho sacrificio, "primero se sienten agobiados porque no llegan a un número suficiente de gente y después, por todo lo contrario porque sienten que tienen que estar constantemente contando su vida".
Uno de los peligros de los que advierte es que, en muchos casos en los que un niño se convierte en influencer, lo hace a espaldas de sus progenitores. Para evitar que esto suceda, anima a los padres a zambullirse de lleno en el mundo digital junto a sus hijos, "no digo que sea lo correcto, pero por lo menos ellos se aseguran que van de la mano", explica Ron.
