MADRID, 11 Ago. (Nuria Chavero/OTR) -
Antonio Velázquez promete convertirse en toda una cara conocida de la pequeña pantalla con su próximo papel en la televisión. Telecinco ha confiado en él para protagonizar la miniserie sobre la vida de Francisco Rivera, 'Paquirri'. Tras un duro casting, el joven actor dará vida al matador de toros, coincidiendo el próximo septiembre con el 25 aniversario de su muerte en Pozoblanco (Córdoba).
Centrado en su actual proyecto, Velázquez quiere olvidar su último fracaso profesional en 'A ver si llego', serie producida por José Luis Moreno. Cuando recibió la noticia de su fichaje para la nueva 'tv movie', primero le llamó el guionista y después el director de la miniserie, el actor confiesa que le ocurrió una "anécdota muy graciosa". "Yo no conocía (personalmente) al guionista y en una fiesta de Pedro Almodóvar me miró y me dijo: "¡Paquirri! ¡Eres Paquirri!". Eso fue un mes antes del casting", cuenta Velázquez.
Sin embargo, la ilusión del nuevo proyecto no le impide reconocer que es algo difícil, aunque aclara que "lo bonito es la investigación". "Estuve una semana en Barbate, en la misma tierra donde nació, en los pinares por donde él corría... y todo eso de la mano de su sobrino. Eso es muy bonito", señala el joven andaluz.
Además, se muestra a favor de las 'tv movies' puesto que las considera como "algo muy parecido al cine", y puntualiza que le parece "genial" que las cadenas de televisión "abran otro flanco".
Aunque está centrado de lleno en la interpretación del matador, no es el único proyecto de Velázquez. La próxima temporada aparecerá en la exitosa serie 'Sin tetas no hay paraíso', aunque no se atreve a asegurar que ahora es su momento profesional: "Lo bueno es que la cadena siga confiando en mí para sus proyectos. Eso me da muchísima seguridad".
Por último, afirma compaginar los dos trabajos con "mucho cuidadito" para no confundirse de personalidad y "no confundir al torero con el futbolista" -su papel en 'Sin tetas'-. Cuenta también que no le cuesta trabajo pasar de un personaje a otro porque no le "dejan los directores". "Me vigilan mucho, hasta el acento", concluye Velázquez.
