MADRID, 8 Jun. (OTR/PRESS) -
'Al fondo hay sitio', de 'Comando Actualidad', en La 1, visita este miércoles a las 22.l5 horas algunos de los 250.000 bares repartidos por todo el país y especializados en distintos tipos de clientes y servicios. El programa de reportajes de Televisión Española ha comprobado que España es un país de bares. Taurinos, cofrades, de carretera, de pescadores, terrazas... Cada uno tiene su clientela y ofrece distintos servicios. Por eso muchos usuarios se sienten en los bares como en casa.
Asturias es la Comunidad Autónoma con más bares por habitante. Un enclave típico es la plaza Requejos, en Mieres, llena de sidrerías. Un camarero trabaja seis días a la semana, su sueldo no llega a mil euros y cada día levanta el brazo unas 1.500 veces para escanciar sidra.
Aunque la crisis ha cerrado muchos negocios, el número de licencias para abrir terrazas ha subido considerablemente, puesto que el 75 % de lo que gana un bar en verano lo factura en la terraza.
Los bares de camioneros son un clásico. Todos buscamos alguno que tenga camiones en la puerta, "señal de que se come bien", y a menudo a mitad de precio. En la A-2 encontramos una miniciudad: el único bar de España para camioneros que tiene un casino en su interior.
Los bares taurinos viven del ambiente de la ferias. Antonio es el propietario del bar 'Los Clarines', próximo a la plaza de las Ventas. Gracias a la afición, con lo que gana en un mes de feria puede vivir todo el año. Los bares cofrades, decorados con motivos de Semana Santa, tienen público todo el año, aunque su temporada fuerte es esa semana. En Casa Ricardo, Sevilla, se hacen 800 croquetas diarias durante la pascua.
En el bar La Parroquia, en Miraflores de la Sierra (Madrid), el camarero se beneficia de los bautizos, bodas y comuniones que se celebran en la iglesia aledaña, aunque los mejores clientes son los que no entran en misa.
En Sancti Petri, Cádiz, existe un bar donde los pescadores desayunan antes de salir a faenar. Como muchos se marean, los camareros sirven incluso pastillas contra el mareo. A su regreso, es el mismo bar el que cocina el pescado recién traído.
