MADRID, 19 Feb. (EUROPA PRESS) -
La colección 'Streetwear' de Agatha Ruíz de la Prada para el próximo otoño-invierno es una combinación comercial y de taller. La pasarela Cibeles simulaba una calle de una ciudad cualquiera en obras en la que transitan mujeres vestidas con prendas ecológicas salidas desde cualquier tienda de ARP o desde la boutique de la calle Serrano de Madrid. Toda una velada crítica de la modista al Ayuntamiento por realizar una gran obra durante varios años en la calle más renombrada de la 'milla de oro' de la capital.
En la colección 'Streetwear' de Agatha Ruíz de la Prada, las prendas de taller se han trabajado las formas estéricas y los patrones circulares y geometrías más rectas. Y como tejidos se han utilizado rasos, terciopelos, fallas de sea, organzas triples que realzan los volúmenes y crean prendas con personalidad propia. Y como de costumbre en Agatha Ruíz de la Prada los tejidos nobles se combinan con otros más tecnológicos como tejidos con memoria, irisados, acolchados irregulados y lamés.
Las formas son las clásicas en las colecciones de la modista madrileña, así la mujer de Agatha del próximo invierno volverá a vestir con michelines, oversize, iconos cosidos y vueltos en seda, aros y faldas con grandes volúmenes que recuerdan tanto al tontillo isalbelino del siglo XVI como a las crinolinas del siglo XIX.
Prendas aparentemente sencillas y llenas de color que constituyen el particular y rico mundo de Agatha, como volantes multicolor, leggins bicolor, etc
Derroche de color también en los complementos, zapatos en colores fuertes como fucsias, naranjas o azulones con tacones altos, gorritos azafata, grandes lazos de tocado, gorras de lana, diademas, gafas... Algún bolso de bandolera.
Acompañando al invitado de honor de los desfiles de Agatha Ruíz de la Prada, su pareja y periodista, Pedro J. Ramírez, estaban en la tribuna de los 'famosos', la baronesa Carmen Thyseen, la historiadora y editora del diario 'El Mundo', Carmen Iglesias y la ex ministra de Cultura, Carmen Calvo.
