LOS ANGELES, 23 Dic. (EUROPA PRESS) -
Jason Alexander protagonizó junto a la Princesa del Pop uno de los romances más fugaces y estrafalarios del panorama estadounidense. Amigos de la infancia, se casaron tras una noche de juerga en una capilla de Las Vegas para terminar anulando su matrimonio tan sólo 55 horas después. El joven ahora vuelve a cuestionar si Brit está realmente enamorada del hombre con el que pasará por el altar por tercera vez.
Parece que Brit ha encontrado junto a Trawick a alguien con quien pasar el resto de su vida pero ya ha salido alguien a cuestionar la veracidad de su amor. Jason Alexander, el marido exprés de Spears, con quien sólo estuvo casado 55 horas, ha arremetido contra la felicidad que respira la pareja y asegura que todo es una "farsa".
"Si ves las fotos se ve que no hay conexión" explicaba a la revista 'Us Weekly'. Y dejaba claro: "Parece que están pensándose todos los movimientos".
También asegura que en su opinión este matrimonio ha sido un "apaño" que ha sido llevado a cabo por el padre y tutor de Brit, su padre Jamie, quien según Alexander es "el que la maneja".
El joven tiene muy claro qué es lo que hay detrás: "Creo que todo esto es una farsa pero la gente tiene miedo de decirlo".
No piensa lo mismo su otro ex, Kevin Federline, quien cuando se enteró de la noticia de la futura boda de Brit no dudó en felicitarla y desearle toda la suerte del mundo en esta nueva etapa junto a Trawick. "Estoy muy contento por ella, es feliz y lo está haciendo muy bien. Quiero decir que la veo en muy buen lugar" comentaba Kevin a la televisión australiana 'TV Week'.
