NUEVA YORK, 15 Nov. (EUROPA PRESS - Sandra del Caño Morales) -
Este lunes por la noche el mundo del espectáculo y la moda volvieron a darse la mano en la entrega de los premios CFDA/Vogue Fashion Fund, celebrados en la galería Skylight Soho de Nueva York. Allí mismo se desplegó una alfombra roja en la que no faltaron los estilismos de lujo y la siempre acertada combinación bicolor.
Tres fueron las absolutas reinas de la tendencia Black & White. En primer lugar, una espectacular Olivia Wilde que optó por un precioso vestido negro con escote geométrico en el que llamaba la atención una abertura en forma de rombo.
De un ceñidísimo cuerpo nacía una falda plisada de vuelo y, a lo largo de todo el diseño pequeños bordados de círculos. Complementos: un clutch y unos stilettos del mismo tono para no romper la armonía.
En el lado claro se posicionó Amanda Seyfried con un traje de color blanco y largo hasta la rodilla que combinaba plumas en la parte final y una franja de tul. Un toque de negro en el cuello del vestido, en las sandalias tobilleras y en el anillo fue suficiente para lograr la sintonía del perfecto B&W.
Finalmente, apareció el angelito de Victoria's Secret, Doutzen Kroes, quien se convirtió en la indiscutible reina de la transparencia gracias a su elegante look total black. Un cuerpo de manga larga con bordados de encaje e hilo dorado que dejaba intuir su sujetador negro combinado con una minifalda con capa larga superpuesta fueron la mezcla idónea para una explosión de pura sensualidad.
Sin embargo, los auténticos protagonistas de la noche fueron los premiados. Según indica '¡Hola!', el galardón "más cotizado era el CFDA/Vogue Fashion Fund para el 'Diseñador del Año' que supone recibir 300.000 dólares para impulsar un negocio (...) El parisino afincado en Nueva York Joseph Altuzarra se llevó el 'premio gordo', lo que supone la consolidación definitiva de este joven visionario".
