MADRID, 21 May. (EUROPA PRESS) -
Este fin de semana el pueblo danés estaba de celebración. Los príncipes Joaquín y Marie han bautizado a su hija, Athena Marguerite Françoise Marie, la nueva princesa de Dinamarca, en la en la iglesia de Mogeltonder, a pocos kilómetros del castillo de Schackenborg (Copenhague).
Tal y como marca la tradición en la familia real danesa, el nombre de la recién nacida no se conocería hasta el momento de su bautizo. Este domingo, por fin se ha desvelado el secreto: Athena Marguerite Françoise Marie ha sido el nombre elegido por los orgullosos padres.
La nueva princesa fue bautizada por el obispo de Copenhague, Erik Norman Svendsen durante una ceremonia oficiada en la iglesia de Mogeltonder, según informa la revista '¡Hola!' en su edición digital.
Athena Marguerite Françoise Marie estuvo acompañada en tan señalada fecha por sus padres, su hermano Henrik y un sinfín de familiares y amigos entre los que se encontraban los hijos mayores de Joaquín, los príncipes Nicolás y Félix, fruto de su matrimonio con la condesa Alejandra; los abuelos, la reina Margarita y su marido, el príncipe Henrik y los príncipes Federico y Mary de Dinamarca con sus hijos mayores, los príncipes Christian e Isabella.
Tal y como puede leerse en '¡Hola!' la recién llegada, que lució el mismo faldón que su hermano llevó en su bautizo, se mantuvo muy tranquila durante la ceremonia hasta el momento de recibir las aguas bautismales cuando comenzó a llorar.
Según el comunicado enviado por la Casa Real danesa, los padrinos de la nueva princesa, que nació el pasado 24 de enero, fueron Gregory Grandet y Edouard Cavallier, hermanastros de la princesa Marie de Dinamarca, y los amigos de la pareja Carina Axelsson, mujer de el príncipe Gustavo de Berleburg, hijo de la princesa Benedicta, Julie Mirabaud, Diego de Lavandeyra, Alexandra Heron y Henriette Steenstrup.
