MADRID, 10 Jul. (CHANCE) -
Las críticas recibidas tras publicarse un vídeo en el que aparecía 'supuestamente' lamiendo unos donuts de una pastelería de Lake Elsinore (California) y en el que entonaba su odio a Estados Unidos han sido de tal magnitud, que Ariana Grande se ha visto en la obligación de enviar un comunicado a los medios aclarando el desaguisado.
"Estoy EXTREMADAMENTE orgullosa de ser estadounidense y siempre he dejado en claro que amo a mi país. Lo que dije en un momento privado con mi amigo, quien estaba comprando donuts, fue sacado de contexto, y lamento no haber tenido mejor juicio con mi selección de palabras", puntualizaba la estrella de 22 años. La cantante justifica su desacertado comentario alegando la vida sana por la que ha optado y mostrando su malestar por la facilidad con la que sus compatriotas "comemos y consumimos cosas sin pensar en las consecuencias".
La intérprete Love Me Harder, a la que se le ve en el polémico vídeo lanzado por TMZ junto a su nueva pareja, el bailarín Ricky Álvarez, se lamenta de los altos índices de obesidad infantil de su país, pero reconoce que no eligió las palabras correctas para expresarse. "Mi nueva responsabilidad hacia los demás como figura pública, me esforzaré en hacerlo mejor", finalizó a modo de disculpa.
Las últimas 24 horas no deben haber sido fáciles para la artista, que ayer mismo cancelaba su presencia en el Concierto del Juego de Estrellas de Grandes Ligas que tendrá lugar el próximo sábado, asegurando que se debe a una cirugía oral de emergencia.
