MADRID, 7 Nov. (CHANCE) -
Iñaki Urdangarin y Cristina de Borbón vuelven a ser noticia. Han pasado casi cuatro meses desde que Iñaki Urdangarin entrara en la prisión de Brieva para cumplir una condena de cinco años y diez meses de cárcel por el caso Noós por delitos de malversación, prevaricación, fraude a la Administración, dos delitos fiscales y tráfico de influencias, tras un largo proceso judicial que ha resentido la estabilidad familiar de los Urdangarin Borbón y que hemos ido viviendo poco a poco.
Son muchos los comentarios al respecto, sobre la situación familiar y psicológica de los implicados tras este duro bache en el que, ante todo intentaron proteger a sus cuatro hijos en plena edad escolar, poniendo tierra de por medio lejos de las noticias y habladurías posteriores y pudiendo desarrollarse sin escuchar comentarios sobre líos de papá y mamá.
Mucho se ha hablado durante estos años de un gran desgaste familiar por las situaciones vividas entre el matrimonio, pero lo cierto es, que de cara al público, con cuatro hijos en común con Urdangarin, la hermana del Rey Felipe VI se ha mantenido al lado de su marido desoyendo las posibles recomendaciones del núcleo familiar real.
Tras convertirse en noticia Cristina e Iñaki, porque esta podría haber visitado a un abogado especialista en divorcios, es inevitable recordar como fue ese Caso Noós, con unos de los principales implicados, Pedro Horrach.
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Hace unos días, durante la entrega de los Premios Planeta, tuvimos la oportunidad de hablar con él desde esta redacción donde nos confesaba que volvería a ser el fiscal en el Caso Noós, lo que le ha supuesto perder en el camino, como fue tildado de perro de la Casa Real por parte de la opinión pública, que se encuentra ahora respirando y que el caso Urdangarin no viene a ser más que un trabajo hecho de forma profesional.
CH: ¿Sigue la amistad?
PH: No, es inexistente.
CH: ¿Ha sido el precio mayor perder a un buen amigo?
PH: Algo más he dejado por el camino, no solo la relación con el señor Castro, también otras cosas pero se van compensado con otras. Ahora estoy en una buena situación como abogado y bien, respirando.
CH: ¿Cuál ha sido el titular más duro que ha leído sobre usted o el que menos le ha gustado?
PH: Han sido varias, bastantes, sobre todo cuando me tintaban de perro del gobierno o perro de la casa real, eso sí me dolió, profundamente.
CH: ¿Tiene mejores clientes ahora porque ya le conocen?
PH: La verdad es que esa es la parte positiva de dejar la etapa anterior y disfrutando.
CH: Hizo Pilar Urbano un libro muy reciente ¿en qué es en lo que está más en desacuerdo?
PH: En la visión general que ofrece sobre la condición de la fiscalía sobre mi posición en particular, son interpretaciones erróneas y equivocadas pero ante las opiniones de otros, qué vamos a decir.
CH: ¿Contestará usted con un libro?
PH: Escribió Ana Martínez un libro al respecto y ahí está todo contestado.
CH: ¿Tiene algún libro en perspectiva?
PH: No. De verdad que no.
CH: ¿Sabe algo de Urdangarin?
PH: No lo sé, estoy desvinculado de la fiscalía y no lo sé.
CH: Si algún día decidiera escribir un libro, ¿nos sorprendería? ¿Vale usted más por lo que calla que por lo que habla?
PH: No, está todo dicho ya. Sinceramente.
CH: Si hoy volviéramos a estar en el día 1 de la instrucción y usted pudiera elegir, ¿volvería a ser el fiscal de este caso?
PH: Sí, por supuesto, por qué no, he vivido intensamente estos momentos y profesionalmente para mí ha sido muy positivo a pesar de todo.
CH: ¿Está satisfecho por cómo ha acabado el señor Urdangarín?
PH: Sí. No se trata de estar satisfecho o no, se ha hecho un trabajo, creo que profesional, con un resultado determinado, no hay más.
