MADRID, 27 Oct. (CHANCE) -
Pablo Urdangarín ha vivido, probablemente, el que ha sido uno de los días más especiales de su vida, el de su debut con el primer equipo del Barcelona de balonmano. Un sueño cumplido que llega después de un año durísimo, en el que el hijo de la Infanta Cristina entrenó sin ficha con el Barcelona B, sin imaginar que 365 días después estaría jugando en la Liga Asobal. Un estreno que no se perdieron la hermana de Felipe VI y su marido, Iñaki Urdangarín, que orgullosos asistieron desde las gradas al exitoso primer partido de su hijo con el club de sus amores.
Su constancia y su tesón le han valido su debut en la máxima categoría del balonmano español un mes después de iniciar la temporada con el Barça B en la División de plata, y quienes le han visto jugar aseguran que es rápido, polivalente y muy parecido técnicamente a su padre, Iñaki Urdangarín, que jugó en el club blaugrana durante 14 temporadas en las que ganó todos los títulos imaginables.
Satisfecho, y sin poder ocultar su orgullo, Pablo nos ha contado, con la mejor de sus sonrisas, cómo ha sido su debut con el primer equipo del Barcelona. "Estoy muy contento, muchas gracias", ha asegurado, añadiendo que estuvo "muy bien" y que le hizo mucha ilusión que sus padres pudiesen estar presentes en un día tan importante.
Muy cauto, y centrado en sus entrenamientos, Pablo sueña con tener continuidad en el primer equipo, algo que no da por hecho pese a su notable estreno. "Ya veremos, ya veremos", afirma tímido, sin ocultar su orgullo cuando le preguntamos por las declaraciones de su padre asegurando que es mejor de lo que él era a su edad: "Gracias, sí, bueno".
Sus primeras declaraciones tras su debut con el Barça de balonmano, a continuación:
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