MADRID, 7 Mar. (CHANCE) -
El príncipe Harry ha dado un cambio radical a su vida. El hijo de Diana de Gales dejó hace mucho tiempo los escándalos para dedicarse a cumplir fielmente sus tareas dentro de la corona británica.
Su noviazgo con Cressida Bonas marcha viento en popa. Recientemente se pudo ver a la pareja en uno de los restaurantes más lujosos de londres, allí disfrutaron de una cena junto al cuñado de Cressida, Sam Branson, que a su vez es el marido de la hermanastra de Cressida, Isabella Calthorpe. Los rumores de boda cada vez están más presentes y la prensa británica no descarta que de aquí a unos meses se produzca el anuncio del compromiso.
Mientras los medios británicos comprometen al príncipe, él continúa con su agenda oficial y ayer mismo pudo disfrutar de una apasionante mañana junto a los soldados heridos de guerra. Harry jugó un partido voleibol muy divertido y comprometido, además dio un dircuso donde alabó la figura de tanto de los heridos como de los rehabilitadores.
Esta iniciativa se encuentra dentro de los "Invictus Games 2014" que han tenido lugar en el parque Olímpico de Londres. Los "Invictus Games" han sido creados como un método para los heridos en guerra, donde se usará el deporte como una forma de recuperación y rehabilitación tanto física como psicológica.
El príncipe Harry, que ha servido en el ejército, conoce desde dentro como de duras pueden llegar a ser las secuelas generadas por la guerra; por lo que es uno de los primeros en apoyar este tipo de iniciativas y participar en ellas.
