MADRID 19 Mar. (EUROPA PRESS) -
Si tuviésemos que elegir una estación que se relacionase directamente con la sonrisa, ésta sería sin duda sería la primavera. Algunos podrían decir que quizá el verano, pero, a la primavera se llega del invierno, y no hay nada como dejar los colores grises y las prendas de abrigo para abrir las ventanas y disfrutar del buen tiempo.
La sonrisa, nadie lo duda, es la forma que tenemos los seres humanos de expresar la parte positiva de nuestras emociones. Se inicia en la segunda semana de vida como un acto espontáneo, a la sexta semana ya se considera que es un acto social y a los seis meses es una respuesta positiva de socialización.
No queda mucho para que el próximo 7 de abril se celebre el Día Mundial de la Salud, así que de la mano de Iván Malagón, el odontólogo español de moda, hacemos un recorrido por los beneficios que aporta la sonrisa:
- Sonreír disminuye el estrés; la risa reduce el nivel de cortisol en el organismo, una de las hormonas que causan la ansiedad.
- Sonreír mejora el sistema inmunológico, pues se estimula la producción de endorfinas, encargadas de la defensa del organismo.
- Sonreír relaja el sistema muscular y libera la tensión.
- Sonreír es bueno para el corazón: un grupo de científicos estadounidenses consideran que la risa, igual que el ejercicio, hace que los vasos sanguíneos trabajen con mayor eficacia.
Además de los físicos, también existen beneficios psicólogicos:
- Sonreír nos hace más atractivos y mejora nuestra autoestima, además facilita las relaciones sociales y la capacidad para hacer amigos.
- Sonreír nos ayuda a restar importancia y estar más calmados frente a situaciones de tensión o miedo.
- Sonreir mejora el ambiente que nos rodea, pues suele producir un efecto contagioso que mejora el ánimo de quienes están a nuestro alrededor.
No nos olvidemos, personas con Bob Marley, Nelson Mandela o el Dalai Lama son lo que son gracias a que su vida ha sido y es un ejemplo para muchos seres humanos. Pero los tres comparten también una característica común: su sempiterna sonrisa.