MADRID, 1 Feb. (EUROPA PRESS) -
Mi casa es la tuya recibe a Rappel, el diseñador, vidente y relaciones públicas mñas famoso de la historia de la televisión. Bertín Osborne visita el palacete del madrileño y repasará sus orígenes en la moda, la televisión y descubrirá el lado menos conocido de el adivino. El propio adivino ha dicho sobre el programa que le gusta porque "No escarba en cosas morbosas, es un cotilleo bonito" y que va a servir para que la gente le conozca más allá de las plumas y las túnicas.
El presentador va a charlar sobre sus orígenes de diseñador del que nunca ha hablado y que solo conocen las y los que fueron clientes y es que el mismo se diseñaba sus túnicas, que le hicieron mundialmente conocido. No va a perder la oportunidad para contar la historia que le hizo aparecer en medio de la calle solo ataviado con un tanga rojo y corriendo de forma desesperada.
Va a repasar más momento como la vez que Cristina Onassis llegó a pedirle matrimonio. Hablará de su vida personal, sobre sus 3 hijos: Susana Rafael y Tatiana y sobre el pequeño, su hijo Humberto, que murió como él mismo predijo y también de la mujer con la que compartió su vida durante 16 años. Y sin olvidar como la afamada periodista Encarna Sánchez, temió que el adivino la desbancara en cuestiones de audiencia o el triunfo del adivino televisivo en Italia junto a Rafaella Carrá.
La hija de Rappel también va a ser protagonista en la visita de Osborne al palacete en el que vive el adivino. Se repasarán sus adivinaciones más conocidas y acertadas como la duración del programa Tómbola que predijo que serían 7 años y así fue. También contará su etapa como relaciones públicas de artistas de gran talla internacional y desvelará los nombres de los famosos que le han consultado y que eran desconocidos a día de hoy.
La casa del también empresario tiene una piscina en el salón, según cuenta su hija. El mismo reconoce que "es como un museo" y que por su manera de ser y de pensar, "no puedo vivir en piso normal con salón baño y cocina "porque afirma que lo que de verdad no puede faltar en su casa " son los recuerdos". El adivino vive en una casa enorme en el centro de Madrid y cuenta con un gran jardín y una terraza envidiable.
En el interior de la mansión cuenta con una gran cantidad de obras de arte, esculturas, mobiliario... Una cama enorme, tapíces de todo tipo, un salón que de verdad recuerda un museo.
Rappel incluso va a predecir si Bertín va a durar junto a su mujer Fabiola.
