MADRID, 8 Sep. (CHANCE) -

Rocío Carrasco y Fidel Albiac ya son marido y mujer. La hija de Rocío Jurado se casaba con su pareja después de dieciséis años de relación. Una ceremonia oficiada por el alcalde de San Agustín de Guadalix que comenzó con un sentido homenaje a la más grande.

Entre los 230 invitados pudimos ver a Las Campos, a las compañeras de Hable con ellas, a amigas como Lara Dibildos y Paulina Rubio, y a una parte muy reducida de la familia materna de la novia. Tan reducida como que solo fue Rosario Mohedano. La cantante acudió acompañada por su marido el mismo día de la boda, sin asistir el día antes a la preboda que daba el pistoletazo de salida a todos los festejos.

Pero Chayo no era la única a la que los reporteros y fotógrafos esperaban a las puertas de la finca Valdepalacios. Rosa Benito, madre de la artista y tía de Rocíito, era una de las que supuestamente iba a acudir a este multitudinario enlace.

Una invitación que finalmente nunca llegó. Chayo Mohedano respondió a las preguntas sobre su madre con un "bueno, nosotros venimos de boda lo demás preguntárselo a ella. Si viene mi madre ya la veréis".

Por su parte, Rosa acudió a la peluquería y salió con un bonito recogido que bien podría haberle servido para ir a la boda de su sobrina.

Aunque en estas imágenes se vea a una Rosa más calmada, la reacción con el reportero antes de entrar en la peluquería demostraba que la ex de Sálvame estaba de lo más alterada.

Sin pistas del paradero de Rosa Benito solo cabe esperar para conocer si reaparece en la procesión de la Virgen de Regla o si sigue desaparecida.