MADRID, 3 Mar. (CHANCE) - La declaración de Iñaki Urdangarin está trayendo tanta cola o más que la de Diego Torres. Si Diego. Y todo llegó... porque la Infanta Cristina se ha quitado ya de encima su declaración que duró 66 minutos y hasta el 30 de junio cuando temina el juicio no la tendremos porqué ver. La hija menor de los Reyes eméritos se reservó el derecho de contestar a las preguntas de la acusación popular y no quiso 'enfrentarse' como tuvo que hacer su marido a Virginia López Negrete. "Mi marido, mi marido, mi marido"... esa fue una de las coletillas más utilizadas por Cristina de Borbón, su marido era el que sabía como iban los negocios familiares y la economía familiar, de qué forma estaban contratados los empleados y ella no sabía quién entraba en su casa. Igualmente ha defendido por completo a su marido confiando en su inocencia y en que estaba bien asesorado, algo que no es de extrañar porque haga uno lo que haga para el camino del mal o del bien siempre uno cuenta con personas formadas. Por su parte, López Negrete piensa que la cosa se va a complicar más en cuanto a las siguientes declaraciones porque: "En periodo instructor se callaron muchas cosas pero hay que ver si en plenario aguantan el tipo. Porque hay que aguantar mucho el tipo". Uno de los testimonios más esperados por Negrete es la del señor notario Carlos Masiá: "Ha visto muchas cosas cuando durante las fimas, conversaciones, actitudes y cuando se van a constituir algo todo el mundo sabe que va a firmar".