Tamara Falcó e Íñigo Onieva: sonrisas, caras cansadas y looks cómodos en su vuelta a casa tras su fiesta de compromiso

Íñigo Onieva llegando a casa tras su fiesta de compromiso
El empresario, cansado pero feliz tras su pedida de mano
Tamara llegó a casa con sus mascotas y varias bolsas
La marquesa de Griñón, con look cómodo y rostro cansado tras su fiesta de compromiso
Tamara ha confesado que su pedida de mano ha sido preciosa y muy especial
La socialité, con gorra y gafas de sol para disimular su cansancio