'GTA Chinatown Wars', todo un 'sandbox' en la App Store

GTA Chinatown Wars
ROCKSTAR
Actualizado: viernes, 19 febrero 2010 17:09

MADRID, 19 Feb. (Carlos Hergueta/Portaltic) -

Si en 2001 alguien hubiese hablado de un 'Grand Theft Auto' en 3D dentro de un móvil, lo más probable es que le hubieran tachado de loco. En el mejor de los casos, de optimisa visionario. El primer juego de la franquicia poligonal acababa de llegar a PS2 dejando a la industria boquiabierta. Pero como siempre ocurre en el mundo de la tecnología y los videojuegos, el mañana es hoy. Os presentamos una de las más mejores formas de gastar dinero en la App Store para iPhone iPod Touch.

Lo mejor:

- Largo, variado, divertido, adulto, gamberro...

- El regreso de los divertidos y "realistas" minijuegos táctiles.

Lo peor:

- El control táctil resulta algo impreciso y eso se nota en la diversión.

- Aunque con mejoras, es el mismo motor gráfico visto en Nintendo DS.

Si a alguien le suena el título del juego que nos ocupa, le suena con razón. Se trata de la tercera adaptación del que fuera el primer 'GTA' para Nintendo DS. Después fue convertido a PSP y ahora son los dos dispositivos táctiles de Apple los que recogen el testigo. Como en las plataformas de Nintendo y Sony, el protagonista de la aventura es Huang Lee, el hijo de un jefe de las triadas chinas que operan en Liberty City.

Lee, que hasta ahora vivía en China ajeno al mundo del hampa, aterriza en la urbe para entregar una espada ceremonial que nunca llega a su destino. Unos matones roban, tirotean y dan por muerto a Lee. Craso error. El joven sobrevive y decide unirse a su tío -y a un montón más de maleantes-, aceptar pequeños trabajitos, ir escalando puestos y, así, cobrarse su venganza.

De esta forma es como tomamos el control de una aventura en tercera persona con disparos y persecuciones de coches. Se trata del género de aventuras de desarrollo libre conocido como 'sandbox' y que inauguró esta misma franquicia. Como asumimos el papel de un novato, las primeras misiones son de toma de contacto: robar un par de coches, llevar un pequeño alijo de "papelinas", poner fin a la vida de algún pobre desgraciado... Los diferentes encuentros con nuestros jefes y otros personajes secundarios se muestran mediante viñetas estáticas tipo cómic, con textos insertados en castellano -donde el sentido del humor y el sarcasmo de Lee son constantes- y siempre con la posibilidad de saltarlas.

Lee siempre tiene a alguien con quien hablar. Lo más habitual es que se pongan en contacto con nosotros mediante un correo electrónico y se fije su posición en el GPS. De esta forma, la PDA cobra una importancia capital y se convierte en un protagonista más. Desde Rockstar han creado una simulación muy realista de un ordenador de mano y podemos navegar por él para gestionar los datos de guardado, cambiar las opciones de control y sonido o personalizar su estética. En el GPS tenemos acceso a contactos o lugares, los cuales marcamos para establecer una ruta.

DESARROLLO Y CONTROL.

La cámara de 'Chinatown Wars' es aérea, en lugar de situarse tras el personaje como ocurre en el resto de entregas tridimensionales. Se trata un regreso a los orígenes de las entregas en 2D que nació en 1997 y, presumiblemente, un recurso para ahorrar trabajo al motor gráfico, que se evita mostrar la ciudad en la lejanía. En todo caso, esto no afecta al desarrollo al que ya estamos acostumbrados y que tantas posibilidades tiene.

El transcurso de las misiones combina de diferentes formas la conducción, las peleas y los tiroteos para garantizar la diversión y la variedad. Y lo consigue sin ningún género de dudas. Controlamos todo tipo de vehículos, coches, motos o barcos, y nos vemos obligados muchas veces a conducir a una velocidad determinada, a evitar daños, a llegar en un tiempo concreto... Nunca hay lugar para un respiro. En cuanto a las armas, tenemos de todo: pistolas, rifles, metralletas, granadas... Además, la pantalla táctil sirve para resolver divertidos minijuegos como "puentear" coches, montar armas o sabotear el motor de un vehículo.

Por otro lado, vuelve el genial sistema de tráfico de drogas. Diseminados por la ciudad encontramos diferentes "camellos" que comercian distintos tipos de drogas a variables precios, con lo que podemos dar auténticos "pelotazos" comprando barato y vendiendo caro. Luego este dinero podemos invertirlo en comprar casas por la ciudad, pintar el coche o mejorar nuestro arsenal. Como decíamos, nadie corre el riesgo de caer en la rutina ya sea viviendo la historia principal o centrándose en las misiones secundarias.

Si bien este desarrollo es tan divertido como habíamos visto en Nintendo DS y PSP, el principal problema que presenta esta versión es la misma que sufren muchos juegos para los dispositivos de Apple: el control irremediablemente táctil. A pie, contamos con un stick -que resulta bastante impreciso- y botones virtuales para movernos, saltar, pegar, disparar y robar coches; en coche, tenemos por defecto con dos botones para la dirección -la más recomendable- pero también podemos elegir un stick analógico mucho más impreciso.

Con práctica nos movemos con más fluidez que durante los primeros compases. Eso sí, es habitual no conseguir apuntar con precisión o errar al intentar girar. Algo frustrante en conjunto. Eso sí, celebramos el regreso, como decíamos antes, de los divertidos minijuegos táctiles, que desaparecieron por razones obvias en PSP -fueron adaptados a los botones de la portátil de Sony-.

APARTADO TÉCNICO.

El motor gráfico creado para Nintendo DS cumple con nota con una versión mejorada. Se ha aumentado la resolución y la calidad de las texturas, por lo que el aspecto de Liberty City es mucho mejor en las pantallas panorámicas de iPod Touch e iPhone. Por lo demás, la ciudad sigue estando llena de vida gracias a una elevada cantidad de detalles destructibles -puestos callejeros, farolas, papeleras...- y peatones deambulando. Por supuesto, podemos robar todos y cada uno de los vehículos que circulan por la ciudad, que presentan daños en tiempo real.

Como conclusión, los gráficos son muy vistosos y detallados y únicamente hay un ligero "pero". Se trata de una mejora de un motor programado para Nintendo DS y por lo visto en otros juegos para la plataforma, al igual que con PSP nos da la sensación de que iPhone e iPod Touch son capaces de ofrecer juegos aún más punteros, con personajes mejor modelados o una vista más amplia del escenario.

En el sonido, los efectos cumplen de sobra a la hora de representar acelerones, derrapes, choques o disparos. Sin embargo, destaca la banda sonora, con decenas de canciones agrupadas en cinco emisores con estilos diferentes, desde temas electrónicos a rockeros. Además, podemos escuchar la música que tenemos grabada en nuestro dispositivo. Sin embargo, esto exige la configuración desde el ordenador vía iTunes, ya que hemos de crear una lista llamada 'GTA'. Como punto negativo, no hay voces.

CONCUSIÓN.

Este título garantiza varias decenas de horas de diversión para los usuarios de iPhone e iPod Touch. Tras haberlo jugado ya en DS y PSP, el control mediante pantalla táctil pierde mucha fluidez y precisión, si bien es posible dominarlo con la práctica. Aunque se trata de uno de los juegos más caros de la Apple Store, 7,99 euros nos parece un precio prácticamente irrisorio, teniendo en cuenta que ofrece una experiencia inédita en estos dispositivos.

NOTAS.

GRÁFICOS: La ciudad es gigantesca, llena de vida y color. Mejora lo visto en DS pero el iPhone puede dar algo más de sí. 8,4.

SONIDO: La música es estupenda y los efectos de sonido variados. Además podemos crear una emisora propia con nuestras canciones. No hay voces. 8,7.

DIVERSIÓN: El control táctil es algo impreciso pero eso no consigue ahogar las muchas posibilidades de un 'GTA' con todas las de la ley. 8,9.

TOTAL: Tener un iPod Touch o un iPhone y no descargar este juego por 8 euros es poco menos que un pecado. A menos que se le tenga alergia a los 'sandbox', hay que llevarlo siempre encima. 8,8.