ALMERÍA, 25 Nov. (EUROPA PRESS) -
El jugador de la UD Almería Miguel Angel García Pérez-Roldán, 'Corona', fue el encargado de leer el manifiesto en repulsa contra la violencia machista durante el acto organizado hoy por el Ayuntamiento de Almería en la plaza del Educador de la capital, en el que abogó por "destruir mitos" que justifican la barbarie ejercida por el maltratador y adoptar una "posición activa".
En el espacio, donde se instaló una mesa informativa rodeada por 57 siluetas humanas con la leyenda 'asesinadas' en memoria de las víctimas mortales a manos de sus parejas durante 2008, el alcalde, Luis Rogelio Rodríguez-Comendador, abrió el turno de intervenciones con un alegato al "compromiso de todos" para erradicar una lacra social para la que, según subrayó, "hacen falta más medios y recursos" al margen de "una mayor concienciación para asumir que la impunidad del agresor nos convierte en cómplices si lo toleramos.
En la parte central del acto, Corona, al que se presentó como un referente social y espejo en el que se miran los jóvenes y niños", abogó por "destruir mitos" que señalan al maltratador como un enfermo mental en la mayoría de los casos a causa del alcohol o las drogas e invitó a dirigir el esfuerzo de todos "a adoptar una posición activa" no permaneciendo en silencio ante ella y "transmitiendo a las generaciones futuras los valores de la no violencia y el respeto a la igualdad entre hombres y mujeres".
Según las cifras facilitadas por IAM, en 2008 se han atendido en Almería a 1.119 mujeres víctimas de malos tratos y que se han practicado un total de 21.603 consultas en los 14 centros que hay repartidos en la provincia relacionados con la violencia machista. Uno de los recursos "estrella" de la Junta, que es la atención psicológica a las víctimas, ha realizado en 2008 un total de 392 intervenciones.
El 70 por ciento de las mujeres en Almería que participaron en 2007 en el programa 'Cualifica' de la Junta --un proyecto transversal que contempla medidas en empleo, vivienda y educación-- han conseguido reinsertarse favorablemente mientras que el 80 por ciento de las mujeres que mueren en casos de violencia de género no recurrieron nunca a ninguna institución.
