ALMERÍA, 1 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Grupo Socialista en el Ayuntamiento de Almería, gobernado por Luis Rogelio Rodríguez-Comendador (PP), ha criticado este jueves la reordenación de las líneas de autobuses llevadas a cabo por el Consistorio en la zona de levante de la capital, al entender que "no da una respuesta adecuada a las necesidades reales de movilidad" de vecinos y entidades ciudadanas.
Según ha indicado el PSOE en una nota, dichos colectivos les han trasladado sus "quejas" por ese motivo, así como por "la falta de información previa, los nuevos recorridos y la frecuencia de paso de los autobuses".
En opinión de los socialistas, la reorganización de líneas "ignora la comunicación directa con la Universidad", de forma que "los jóvenes estudiantes de la zona este del municipio tienen que hacer varios enlaces y emplear hasta dos horas para llegar a su destino", y "no recogen la mayor parte de las peticiones" que, según el presidente de la asociación 'Retamar 2000', José Lozano, trasladaron, entre otras, las asociaciones vecinales de La Cañada, El Alquián, Retamar y San Vicente a la concejal de Movilidad, María Muñiz, en una reunión que mantuvieron "hace dos meses".
Además, dicha reordenación "tampoco ha modificado la ausencia de paradas en Retamar norte, lo que obliga a los vecinos de esa zona a desplazarse, cruzando la carretera, hasta el hospital del Toyo para coger el autobús", y "ha aumentado la frecuencia de paso, convirtiendo los diez minutos de recorrido en coche desde Rematar hasta la Universidad en casi dos horas cuando se utiliza el transporte público".
En concreto, la línea 22 desde Retamar al Alquián pasando por el aeropuerto tiene ahora "una frecuencia de paso de 75 minutos", según el PSOE, que ha señalado además que ni el Ayuntamiento ni la empresa concesionaria "han informado de los cambios previamente, ni han realizado ningún folleto ni campaña informativa para los miles de vecinos residentes en esta parte del municipio".
Por todo ello, el portavoz socialista en el Consistorio almeriense, Juan Carlos Usero, considera que esta reordenación de línea es "un nuevo ejemplo de ordeno y mando" por parte del Ayuntamiento "sin contar con los interesados".
