Abastecidos con camiones cisterna los habitantes de Baños al ser declarada el agua no apta para el consumo humano

JAÉN, 16 Feb. (EUROPA PRESS) -

El agua suministrada a los vecinos de Baños de la Encina (Jaén) ha dejado temporalmente de ser apta para el consumo humano debido a un aumento de su nivel de turbidez, que ha superado ligeramente los parámetros marcados por el reglamento que establece los criterios sanitarios de calidad del agua para el consumo humano. Dos camiones cisterna han sido movilizados para abastecer a esta población de más de 2.700 habitantes.

La Delegación Provincial de Salud ha adoptado esta medida, que se está difundiendo en la localidad a través de carteles, y que no incluye el corte del suministro puesto que el agua está desaconsejada sólo para su consumo directo y la preparación de alimentos, mientras que la utilización para el resto de usos domésticos -aseo, lavado o limpieza, entre otros- no entraña riesgos para la salud.

La Sociedad Mixta del Agua de Jaén, S.A. (Somajasa), empresa encargada de la gestión del agua en alta y baja en el Consorcio de El Rumblar, informó en un comunicado de que ya está trabajando en el restablecimiento de los niveles habituales de potabilidad que vuelvan a permitir su consumo en este municipio. El problema detectado en Baños de la Encina se ha producido debido a las fuertes lluvias de las últimas semanas, que han incrementado el arrastre de lodo y piedras al pantano de El Rumblar, desde el que se suministra agua a este municipio.

El inusual aumento de impurezas en el agua a tratar ha motivado que la estación depuradora con la que cuentan los 2.700 habitantes de Baños de la Encina haya visto superada su capacidad de filtrarlas completamente, lo que ha conllevado el incremento de los niveles de turbidez del agua tratada.

Desde el viernes, día en que se detectaron los primeros indicios de esta pérdida de calidad del agua, Somajasa ha intensificado el trabajo habitual de limpieza de filtros y decantadores y reforzado los protocolos de tratamiento de potabilización del agua en la zona para solucionar esta incidencia en el abastecimiento y poder transmitir a las autoridades sanitarias, tras los análisis pertinentes, el momento en que el agua recupere sus características habituales y éstas determinen nuevamente su potabilidad.

Mientras perdure esta situación, la empresa ha puesto a disposición de los vecinos dos camiones cisterna con agua potable, con 25.000 litros cada uno, que se han ubicado en el aparcamiento de la Carretera de Bailén y en el de la zona del Mercadillo.