JAEN, 15 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Provincial de Jaén confirmó la pena de dos años y cuatro meses de prisión por un delito de apropiación indebida para el abogado de Andújar (Jaén) Ezequiel D.B., que fue condenado en primera instancia por quedarse con dinero de un cliente.
Según informaron a Europa Press fuentes cercanas al caso, la sección primera de la Audiencia desestimó el recurso de apelación presentado por la defensa y confirmó la sentencia condenatoria dictada por el juzgado de lo penal número uno de Jaén.
En el recurso se pedía la libre absolución del letrado argumentando que el propio acusado reconoció la existencia de una deuda y que el cliente denunciante no justificó "que no se hicieran todas las gestiones" que encomendó al abogado.
El juzgado de lo penal número uno de Jaén impuso el pasado mes de julio de 2005 la tercera condena a este abogado de Andújar por un delito de apropiación indebida, fijando, además, el pago de una indemnización de 5.385 euros para el cliente perjudicado.
Este letrado admitió en el juicio que adeudaba ese dinero desde el año 1995 y que desde entonces no le había abonado al cliente esa cantidad porque no había podido hacerlo, aunque subrayó que su "intención es pagar".
Por su parte, el perjudicado declaró que "el 95 por ciento" de las operaciones que le encomendó en febrero de 1995 a Ezequiel D.B. "no se llegaron a realizar" y recordó que tuvo que "pagar un recargo de 1.800 euros" en una de las gestiones que él mismo se vio obligado finalmente a efectuar tras constatar que el letrado no la había hecho a pesar de quedarse con el dinero para ello.
El abogado aseguró que la mayoría de esas gestiones se realizaron y que guardaba los justificantes de las mismas en su archivo, pero agregó que tras ser "desahuciado" de su despacho se llevaron el citado archivo y hasta la fecha no se lo han devuelto. "Mucho me temo que haya desaparecido la integridad de mis archivos", indicó al respecto.
El juzgado de lo penal número tres ya condenó en septiembre de 2004 a seis meses de cárcel a Ezequiel D.B. tras considerar probado que se quedó con el dinero de una fianza de 3.000 euros que tendría que haber devuelto a sus clientes.
Esos hechos se remontaban a los años 1994 y 1995, cuando el letrado recibió 3.000 euros de los padres de un cliente suyo para pagar una fianza por la que éste obtendría la libertad.
Además, Ezequiel D.B. ya fue condenado ese mismo año por apropiarse del dinero de una indemnización que le correspondía a una cliente, a la que negaba que hubiera recibido cantidad alguna, por lo que éste es el tercer procedimiento judicial que afrontaba por hechos delictivos similares.
