SEVILLA, 9 Abr. (EUROPA PRESS) -
Un total de 42 profesores asociados a tiempo completo (también llamados LRU) de la Universidad de Sevilla (US) han solicitado este lunes de forma colectiva al rector de la institución académica, Antonio Ramírez de Arellano, que convierta sus actuales contratos --solo vigentes hasta el próximo 2 de mayo por diversos cambios legislativos y normativos de carácter nacional y regional a los que no se han adaptado en tiempo y forma-- en los que tienen el profesorado incluido en la categoría de ayudantes.
Según estos docentes, la US se niega a convertirlos en profesores ayudantes y se limita a ofrecerles como solución a su problema "un contrato de sustitución desde el 2 de mayo hasta el 30 de septiembre", algo que consideran, en palabras del portavoz del colectivo, Javier Navascué, "sangrante". "Lo que nos ofrecen es ser sustituto y nosotros no estamos sustituyendo a nadie, sino que aquí, el que menos, lleva diez años dando clases con la misma dedicación, carga docente y responsabilidad que un catedrático", argumenta.
Por ello, reclaman a la Hispalense que les convierta en profesores ayudantes porque dicho contrato, "al menos, tiene una duración de cinco años y no es una sustitución hasta septiembre como nos proponen, que encima, es con menos sueldo del que estamos cobrando en la actualidad".
Sin embargo, la US duda de que esta propuesta esté dentro "del marco legal" vigente en la actualidad. Según han explicado a Europa Press fuentes de la institución académica, el problema de estos 42 profesores asociados a tiempo completo es que, por "x motivos, no se han podido adaptar" a los cambios legislativos y normativos que les correspondían en el tiempo establecido para ello.
De hecho, desde 2001 que se promulgó la Ley Orgánica de Universidades (LOU) hasta la fecha, un total de 888 de los 930 docentes LRU que tenían estos contratos administrativos a tiempo completo han podido transformarlos en contratos laborales y pasar a engrosar la categoría de Profesor Docente Investigador (PDI). Los requisitos principales para ello eran presentar una tesis doctoral y acreditarse ante alguno de los organismos competentes como la Agae (Agencia Andaluza de Evaluación) o la Aneca (Agencia Nacional de Evaluación de la Calidad y Acreditación).
La LOU, en una disposición transitoria, estableció un periodo de cuatro años para que estos profesores LRU se adaptaran a los requisitos exigidos al PDI. Más tarde, la Ley Andaluza de Universidades (LAU), amplió este plazo de transición hasta 2007, año en el que en la Universidad ya solo había 80 profesores LRU y en el que el Gobierno central aprobó una "prórroga" de otros cinco años (la LOM-LOU), hasta 2012. Es decir, que estos docentes "llevan once años sabiendo que tenían que adaptarse y cambiar su figura administrativa por una laboral", algo que "el resto lo hizo en plazo y ahora ocupa una contratación laboral fija en la Universidad", resumen las citadas fuentes de la Hispalense.
En cualquier caso, la US recalca que valora el trabajo de estos 42 profesores y que no tiene "ninguna intención de dejar en la calle a profesor alguno". Por eso, añade, se ha ofrecido a estos docentes "un contrato como interinos hasta el 30 de septiembre". "Eso de entrada para que no se vea interrumpida la docencia", recalcan desde el Rectorado, donde informan de que el próximo jueves 12 de abril Ramírez de Arellano recibirá a los representantes de este colectivo.
En este encuentro se tratará de buscar una solución al conflicto basada en tres puntos clave: que ningún profesor se quede en la calle, que se "cumpla la legalidad" y que sea un acuerdo consensuado con las otras universidades andaluzas que sufren este problema.
