SEVILLA, 3 Feb. (EUROPA PRESS) -
La asociación de mayoristas de fruta, verdura y hortalizas de Mercasevilla, --socio minoritario de la sociedad gestora del mercado central de abastos hispalense--, ha encajado con "sorpresa" el expediente disciplinario incoado por la agencia de Innovación y Desarrollo de Andalucía (IDEA) contra el propio director general de la lonja hispalense, Manuel Blanco, a cuenta de la presunta sustracción de documentos cuando Blanco ostentaba un cargo directivo en el mencionado organismo. Los mayoristas de fruta y hortalizas, en ese sentido, se muestran "cansados" de que Mercasevilla esté continuamente en la cima del debate público y abogan por "pasar ya página a esta fase".
El gerente de la asociación de mayoristas de fruta, verdura y hortalizas de Mercasevilla, Fernando Castro, ha señalado, en declaraciones a Europa Press, que este colectivo de empresarios está "sorprendido" a cuenta del mencionado expediente disciplinario, que analiza la supuesta sustracción de documentos confidenciales cuando Manuel Blanco ejercía un cargo directivo en IDEA. La documentación en cuestión, de hecho, versaría sobre expedientes de regulación de empleo (ERE) y habría sido posteriormente utilizada por el PP andaluz.
"CANSADOS" DE POLÉMICAS
Castro, de cualquier modo, ha avisado de que los empresarios del mercado central hispalense están ya "cansados" de que Mercasevilla, participada mayoritariamente por el Ayuntamiento hispalense y Mercasa, sea continuamente objeto del debate público y político. Y es que sobre la anterior gestión de Mercasevilla pesan tres líneas de investigación promovidas por la juez Mercedes Alaya desde el juzgado de Instrucción número seis de Sevilla, que indaga, en concreto, un posible delito societario, la presunta petición de comisiones ilegales que habrían protagonizado los exdirectivos Fernando Mellet y Daniel Ponce y las supuestas irregularidades detectadas en el procedimiento de enajenación de los suelos del mercado central.
"Hay que terminar ya esta fase y pasar página", ha enfatizado Fernando Castro, quien ha defendido la necesidad de que Mercasevilla salve sus dificultades financieras y se convierta en una empresa viable. Porque Mercasevilla cerró 2010 con pérdidas por valor de 381.560 euros, después de que 2009 se saldase también con pérdidas de 4.123.666 euros, pesando además sobre sus cuentas un pasivo de 9.046.976,95 euros por la financiación del expediente de regulación de empleo promovido en 2007.
A este procedimiento, como se recordará, se adhirieron 40 trabajadores cuyas prejubilaciones han quedado paralizadas al desligarse la Consejería de Empleo de la financiación del ERE pese a los documentos firmados por el que fuera director general de Trabajo y Seguridad Social Francisco Javier Guerrero, imputado en la trama que indaga también la juez Alaya sobre prejubilaciones fraudulentas.
