ZARAGOZA, 22 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Diputación Provincial de Zaragoza (DPZ) rinde homenaje al centenario del nacimiento de la escuela Bauhaus con una exposición en el Palacio de Sástago, realizada en colaboración con el Colegio de Arquitectos de Aragón, y que se podrá visitar desde este martes hasta el próximo 5 de enero.
"El movimiento Bauhaus es un modo de vida porque ellos creían que el ocio, la diversión y el trabajo ayudaban a la creatividad", ha explicado la diputada delegada de Cultura de la DPZ, Ros Cihuelo, durante la presentación de la exposición.
Según ha señalado, "era un compromiso de vida absolutamente novedoso, no sólo por la manera de construir y diseñar, sino también en la manera de concebir la enseñanza y la pedagogía para ser parte del movimiento".
La diputada delegada ha destacado también la historia de la escuela que, pese a solo haber existido durante 14 años en un momento muy convulso en la Alemania de los años 20, adquirió un "compromiso de arte total", con un "punto de vista utópico con tintes políticos", que resultó "incómodo para las autoridades", pero que dejó la "impronta" de una "ruptura vanguardista" del arte y el diseño y que también favoreció la incorporación de la mujer a estas esferas.
Por su parte, el decano del Colegio de Arquitectos de Aragón, Pedro Navarro, ha considerado que se puede decir que la arquitectura moderna "surgió de la Bauhaus" y que ésta fue tan influyente que desde los años 60 hasta la actualidad "se sigue trabajando con sus principios".
De esta manera, ha apuntado a una colección de sillas diseñadas por los arquitectos de la Bauhaus que forman parte de la exposición en la DPZ que "siguen siendo totalmente modernas".
A su juicio, la arquitectura "más avanzada" de la actualidad "se está acercando" al estilo de la escuela alemana. "Esto quiere decir que ha marcado muchísimo a todo un siglo de arquitectos que han venido detrás", ha aseverado el decano.
RECTAS Y FORMAS GEOMÉTRICAS
Las construcciones arquitectónicas de este movimiento se basaron en líneas rectas y formas geométricas que dejaban atrás los adornos propios de estilos anteriores para trasladarse tanto a la arquitectura, como al diseño gráfico, la pintura e incluso la decoración de interiores.
La muestra 'La Bauhaus: un experimento artístico y pedagógico. 1919-2019' que se presenta en el Palacio de Sástago de la DPZ está comisariada por Ricardo Marco y coincide con la exposición dedicada a las obras y proyectos de Rafael Moneo en Aragón, que también se puede visitar hasta el próximo enero.
Durante la presentación de la muestra, el comisario ha recorrido la colección, al tiempo que ha ido explicando las distintas áreas que la componen como, por ejemplo, una destinada a la historia de la propia escuela Bauhaus, cuya "vida frenética", según ha indicado, coincide con la historia de la República de Weimar en Alemania pues ambas "nacen y mueren al mismo tiempo".
La exposición realiza también un recorrido temporal por el desarrollo de la escuela con sus tres etapas diferenciadas a cargo de tres directores muy diferentes: Walter Gropius (1919-1928), Hannes Meyer (1928-1930)y Miles von der Rohe (1930-1933).
Así, pese a contar con modelos pedagógicos diferentes, el comisario ha subrayado que, a lo largo de su historia, el estilo se identificó con el de "prismas blancos sin adorno exterior" pero, contrariamente a la imagen que evoca, con un interior "muy colorido, intenso y saturado".
Por ello, Marco ha llamado a "desmitificar" la idea de que estos arquitectos y artistas "no tenían sensibilidad" puesto que el color ejercía como "elemento fundamental".
REBELDÍA
El comisario ha destacado que las construcciones de los integrantes de la Bauhaus partían de la "rebeldía" frente al nacionalsocialismo que empezaba a germinar en esos años como por ejemplo, la construcción de tejados planos frente a las cubiertas tradicionales germanas a dos aguas.
De igual manera, una de las ideas fundamentales de la escuela, según el comisario, era que la "función" de los objetos diseñados debía "conformar la forma".
La muestra incluye también unos espacios concretos dedicados al trabajo de los talleres que se realizaban en la escuela, la fotografía, las monografías de temas específicos, como el color, las caricaturas, los juegos o los objetos de diseño, así como una sección dedicada a la incorporación de la mujer a la arquitectura y las diferentes artistas que pasaron por la Bauhaus durante su recorrido.
Por último, la colección contiene también una pequeña muestra de las publicaciones que realizaban y editaban alumnos y maestros de la escuela y que publicaron un total de 12 libros, un 'journal' a modo de publicación periodística, así como la revista 'Offset' y una serie de panfletos.
