ZARAGOZA, 14 Oct. (EUROPA PRESS) -
Agentes de la Policía Nacional han detenido a tres individuos de nacionalidad marroquí como presuntos autores del secuestro de un hombre. Los arrestados solicitaban el pago de una antigua deuda de 3.270 euros contraída por el secuestrado. Tras su liberación, en un área de servicio próxima a Zaragoza, la víctima manifestó a los agentes que había temido seriamente por su vida.
Según informó la Policía Nacional, la operación se inició cuando un ciudadano marroquí afincado en España comunicó a la Policía que su suegra, residente en Marruecos, había recibido varias llamadas de una persona que se expresaba en árabe.
Le comunicaban que su hijo estaba secuestrado en España y que le matarían si no saldaban una deuda de 3.260 euros. La madre de la víctima facilitó a los secuestradores el teléfono de su yerno para que trataran directamente con él. Fue éste último la persona que finalmente denunció los hechos.
El denunciante, antes de hablar con la Policía, recibió una llamada de los secuestradores en la que le hicieron saber que tenían retenido a su cuñado y que estaban dispuestos a matarlo si no satisfacían sus exigencias. Durante esta conversación permitieron a la víctima hablar directamente con su familiar, quien le confirmó que era víctima de un secuestro, manifestándole además que se encontraba bien.
ENCUENTRO EN LA EXPO
Tras esta primera conversación, el pasado día 4 de octubre, se produjo una cita entre esta persona y dos de los secuestradores en la ciudad de Zaragoza, en la zona de la Expo --meandro de Ranillas--. Durante el encuentro, una vez más, le indicaron que si quería volver a ver vivo a su cuñado, tenía que liquidar la deuda contraída. Inmediatamente después, tras verificar la seriedad de las amenazas, se puso en contacto con la Policía y denunció lo sucedido.
A partir de ese momento se activó el protocolo de actuación establecido por la Comisaría General de Policía Judicial para delitos de esta naturaleza, desplazándose agentes de la Sección de Secuestros de la UDEV Central a Zaragoza, para, de forma coordinada con el grupo de Homicidios de la BPPJ de Zaragoza, iniciar las investigaciones y verificar 'in situ' los hechos.
Después de realizar las primeras pesquisas, los agentes concluyeron que la deuda contraída podría tener su origen en una transacción entre narcotraficantes. Paralelamente se sucedieron nuevas llamadas, en las que reiteraban que se hiciese entrega de la cantidad indicada y amenazaban con matar al secuestrado si no era saldada en un breve periodo de tiempo.
Una vez que los investigadores obtuvieron datos suficientes, tanto de los posibles autores como de la zona en que pudiera encontrarse el secuestrado, se estableció un dispositivo para liberar a la persona retenida y detener a los raptores. Finalmente, se acordó entregar el dinero en un área de servicio cercana a la capital aragonesa a última hora del día.
DETENCIÓN
Para recoger el dinero acudieron dos ciudadanos marroquíes que fueron inmediatamente detenidos. A la vez, gracias al amplio despliegue policial, en el que participó el GEO, se detectó que la persona secuestrada se encontraba dentro del maletero de otro vehículo, tapado con mantas. La víctima fue liberada y se detuvo a uno de los secuestradores que realizaba labores de custodia.
Tras su liberación, el secuestrado mostraba varias lesiones sufridas durante su cautiverio y manifestó haber temido seriamente por su vida. Sus raptores desde el primer momento le dejaron bien claro que moriría si algo salía mal.
La operación policial ha sido desarrollada por la Sección de Secuestros y Extorsiones de la Unidad de Delincuencia Especializada y Violenta de la Comisaría General de Policía Judicial, el Grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de Aragón y el GEO.
