TOLEDO, 30 May. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Provincial de Toledo condena a un hombre de 27 años, de nacionalidad portuguesa, a tres años y seis meses de prisión por un delito de falsedad de documento mercantil al considerar probado que cobró cuatro cheques de una empresa para la que había trabajado con anterioridad y de la que guardaba las llaves de las oficinas.
Según la sentencia, a la que ha tenido acceso Europa Press, los hechos ocurrieron el pasado día 4 de julio de 2003, cuando el acusado, con domicilio en Seseña (Toledo) sustrajo cuatro cheques de la empresa de la que había sido empleado, en Noblejas, tras acceder a las oficinas con las llaves que utilizaba cuando trabajó en ella.
Dichos cheques los presentó para su cobro en días posteriores en las sucursales de la Caja Castilla La Mancha de Noblejas y Aranjuez, y en la sucursal de Caja Rural de Toledo en Ocaña, llegando así a obtener las cantidades de 566, 793 y 416 euros. Sin embargo, el ingreso por 408 euros fue cancelado por la respectiva sucursal.
El condenado deberá hacer frente a una indemización de 793 euros que reclama el propietario de la empresa de la que sustrajo los cheques, esto es, la cantidad que fue cobrada por el acusado en la sucursal de Ocaña de Caja Rural de Toledo, y 982 a CCM, que reintegró a la empresa esta cantidad, en calidad de perjudicada.
