Confía en el avance de la vacunación para reactivar el sector turístico de cara al verano
BARCELONA, 8 Abr. (EUROPA PRESS) -
Turisme de Barcelona encabezará la próxima semana una misión de promoción presencial en las ciudades rusas de Moscú y San Petersburgo para acelerar la reactivación del sector y situarse como destino seguro frente a la pandemia de la Covid-19.
En una rueda de prensa este jueves, el presidente de Turisme de Barcelona, Eduard Torres, ha destacado que "con el proceso de vacunación avanzado, el certificado verde digital y con una Semana Santa en la que se han visto ganas de viajar, vemos la luz al final del túnel".
Esta acción se enmarca en el acuerdo que el consorcio firmó con el organismo homólogo en Moscú para establecer un marco de cooperación bilateral y fortalecer el flujo de turismo entre las destinaciones turísticas.
La directora general del consorcio, Marian Muro, ha dicho que quieren incrementar en un 10% el visitante ruso que viene a Barcelona en los próximos dos años, aunque ha admitido que dependerá de la frecuencia de vuelos y otros aspectos "que se escapan de sus manos".
En 2019 Barcelona recibió 195.450 visitantes rusos (2,1% de cuota de mercado) y realizaron 486.785 pernoctaciones, y la capital catalana acoge uno de cada cinco turistas rusos que llegan a España.
Muro ha explicado que se trata de un mercado que da mucha importancia a la identidad propia y al estilo de vida de Barcelona, que se siente atraído por la cultura y el patrimonio arquitectónico, amante de la música y el teatro, la gastronomía y el producto de calidad y de proximidad.
EL 80% QUIERE VIAJAR
Desde el inicio del relajamiento de restricciones, cerca del 80% del mercado ruso desea hacer un viaje, sobre todo en 2021, y en el primer trimestre de este año Rusia ha sido uno de los mercados que más reservas de vuelos internacionales ha realizado.
Ha añadido que el viajero ruso tiene una percepción de Europa como destinación segura y que la mayoría de los que se propone viajar este año tiene un perfil "de alto nivel adquisitivo" e interés por la cultura, el clima, las compras y la gastronomía, entre otros.
En relación al gasto medio, el visitante ruso gasta 446,56 euros por persona, un valor por encima de la media general, que se sitúa en los 345,49 euros (sin contar alojamiento y transporte), en una diferencia que se eleva en el alojamiento: de los 406,47 euros por viajero ruso frente a los 270,97 de media.
PRINCIPALES COMPETIDORES
Muro ha explicado que las principales ciudades europeas competidoras por el mercado ruso son París y Roma, aunque ha confiado en el trabajo de promoción que hace la capital catalana: "Esto será una carrera y todos los destinos están trabajando en un marco post-Covid".
Ha adelantado que a esta acción con Rusia la seguirán otras en Francia, Gran Bretaña y Estados Unidos, y el concejal de Turismo, Xavier Marcé, ha insistido en que la gestión del sector no puede ser pasiva y se debe trabajar conscientemente en los mercados que se quiere atraer.
"Esta acción es una muestra del cambio hacia el turismo que queremos: más comprometido, aspiracional y sostenible y del que queremos ver en el futuro desde Barcelona, con campañas como esta para segmentos específicos", ha concluido Marcé.
El contenido de esta noticia está elaborado en colaboración con el Ayuntamiento de Barcelona
