BARCELONA, 28 Ene. (EUROPA PRESS) -
La Policía Nacional y la Guardia Urbana de Barcelona han desarticulado en Barcelona un grupo de estafadores que presuntamente se dedicaba a comprar automóviles y aparatos electrónicos obteniendo créditos bancarios presentando documentación falsa y que estafó más de 300.000 euros.
Según informaron hoy ambos Cuerpos, detuvieron en Barcelona, L'Hospitalet de Llobregat y Santa Coloma de Gramenet (Barcelona) a ocho dominicanos por los delitos de falsedad documental, estafa, asociación ilícita y tráfico de drogas.
Formaban un grupo organizado, con relaciones internacionales, que actuaba desde hacía más de un año y cuyos miembros tenían adjudicadas distintas funciones: falsificación, captación de colaboradores, obtención de tarjetas de crédito y compra de artículos con financiación obtenida de forma fraudulenta.
La banda falsificaba documentos de identidad con los que solicitaban tarjetas bancarias y créditos de consumo a bancos para adquirir artículos que luego revendían.
En muchos casos, elegían un establecimiento, siempre en la ciudad de Barcelona, y un miembro compraba el producto pidiendo un crédito con un documento de identidad falso.
La investigación empezó en marzo cuando una entidad crediticia denunció una serie de operaciones de compra y financiación, que habían realizado varios dominicanos para adquirir vehículos en un concesionario de Barcelona.
En la operación, los agentes hicieron dos registros en un domicilio de Barcelona y otro de Santa Coloma, donde intervinieron documentación y llaves de vehículos, nóminas falsas, fotocopias de documentos de identidad, 435 euros en metálico y 45 gramos de cocaína.
La investigación, que ha llevado a cabo el Grupo 3º de la UCRIF de la Jefatura Superior de Policía de Barcelona y la División de Seguridad, Servicio de Información y Documentación de la Guardia Urbana, sigue abierta y no se descartan más detenciones.
DIEZ DETENIDOS DE OTRA BANDA
En otra operación de la Policía Nacional que se desarrolló ayer en Barcelona, los investigadores detuvieron a diez dominicanos que presuntamente se dedicaban al mismo fraude, aunque no tenían ninguna relación.
Según informaron a Europa Press fuentes policiales, obtenían créditos para el consumo con documentos falsos que utilizaban para comprar ordenadores, teléfonos móviles, ropa de marca y perfumes, entre otros artículos de lujo, que luego vendían a terceros.
