Una inquilina lleva casi cuatro años sin agua por la dejadez de los propietarios

Ciudad de la Justicia, L'Hospitalet
EP-MLC
Actualizado: martes, 7 febrero 2012 18:59

BARCELONA, 7 Feb. (EUROPA PRESS) -

Una inquilina de una buhardilla de un inmueble en estado ruinoso de la calle Milton de Barcelona lleva desde abril de 2008 sin suministro de agua por la dejadez de los que hasta hace poco eran propietarios de la finca, que son familia y están peleados entre sí.

"Se iban tirando la pelota de uno al otro", ha lamentado la inquilina Gloria H., inválida en silla de ruedas, durante el juicio celebrado este martes en el Juzgado de Instrucción número 6 de Barcelona en el que también han declarado los tres acusados: los hermanos María Luisa L. y Joaquín L., y su prima Alba A., con quien están enfrentados.

Desde abril de 2008 no tiene agua en su domicilio ya que la tubería por el que se hace el suministro pasa por un local comercial situado en los bajos del inmueble alquilado a otra persona, y que por un escape de agua éste se ve obligado a cerrar el paso del agua para evitar daños en su tienda.

Los propietarios del inmueble, según el escrito previo del fiscal, no han hecho nada para arreglarlo "a pesar de que la señora Gloria H. lo ha puesto en repetidas veces en conocimiento de los mismos".

"Que me digan la verdad, que era una 'okupa'. Alba A. me dijo que no tenía derecho a vivir allí", se ha quejado Gloria H., que paga un alquiler de renta antigua de apenas 50 euros, por subrogación del contrato que ya tenía su madre, que todavía vive aunque no lo hace en este inmueble.

Además de la falta de suministro de agua, también ha tenido durante un tiempo cortada la luz, tanto de la vivienda como de la escalera porque los propietarios no pagaron las facturas a la compañía.

El fiscal, en sus conclusiones, acusa a los tres de un delito de coacción y ha considerado que era su obligación mantener el suministro a la vivienda de Gloria H. y que el hecho de que la tubería pase por el bajo comercial "es irrelevante".

También considera que, pese a las disputas entre los primos sobre la responsabilidad sobre la vivienda, los tres actúan como si fueran los titulares de la finca.

En sus declaraciones, los acusados se han desentendido de su responsabilidad: "No entendí por qué de repente se le cortó el agua, no sabía que había un problema de fuga", ha defendido Alba A, que entonces instó a la inquilina a que reclamara a sus primos que eran quienes cobraban el alquiler.

"Pensaba que se había dado el agua. Tuve conocimiento pero no pude hacer nada porque no podía entrar" en el local comercial, se ha defendido Joaquín L.

En su escrito previo, el fiscal pidió imponer a los tres acusados la pensa de treinta meses de prisión por un delito de coacciones.