El Castell de l'Olla de Altea renueva y mejora las plataformas para el disparo pirotécnico desde el mar

   ALICANTE, 1 Ago. (EUROPA PRESS) -

   El Castell de l'Olla de Altea (Alicante) ha invertido 20.000 euros en la renovación y mejora de las plataformas desde las que se dispara el espectáculo pirotécnico íntegramente desde el mar.

   Se trata de cinco plataformas dobles de hierro ubicadas a 250 metros de la costa y separadas entre sí por 100 metros. Complementariamente, también se cuenta con 3 pantanales flotantes dobles distanciados también entre sí por 100 metros.

   Esta disposición, ubicación y distribución se lleva a cabo para diseñar el disparo de cohetes de tal manera que el espectador vea una fachada de fuegos a tres niveles de explosión: acuáticos, media altura y máxima altura.

   De igual modo se colocan los pantalanes más cerca de la costa para que el público perciba de manera próxima la luz, el color y el sonido y a dos distancias, consiguiéndose así una combinación que favorece la visión y audición global del castillo, explica la Cofradía del Castell en un comunicado.

   En este mismo sentido, al haber distintos lugares de lanzamiento de material pirotécnico se favorece que se vaya evacuando el humo para una mejor visión y contemplación.

   El diseño, inciden, es "muy meticuloso" y en él trabajan la cofradía y los pirotécnicos cada año para "mejorar el espectáculo de fuegos de artificio y de tal forma potenciar sus efectos visuales y sonoros".

EL "MAYOR ESFUERZO"

   El agua del mar y las inclemencias meteorológicas hacen que el material precise año tras año de un mantenimiento exhaustivo. Este año se ha procedido "al mayor esfuerzo" en este sentido al cumplirse 20 años de la fabricación de las plataformas diseñadas por ingeniaros de la Universitat Politcnica de Valncia.

   En estos contenedores de hierro el mantenimiento ha consistido en sustituir el fondo corroído en el bajo suelo, colocar nuevo respiraderos para evacuar el agua de condensación durante la hibernación.

   Igualmente se les ha colocado grifos de vaciado, un nuevo acceso al interior, y se ha renovado el interior según criterios del pirotécnico tanto para el montaje como para mejorar el disparo. Finalmente, las plataformas se han impermeabilizado y pintado.

   La adecuación de los pantalanes han consistido en reforzarlos, sanear el suelo de madera, renovar los flotadores de poliéster rellenos de poliespán y otras reparaciones de ensamblado y estabilidad.

   "Hace 20 años profesionalizamos el Castell de l'Olla cuando ideamos junto a los ingenieros de la Universidad Politécnica de Valencia una innovadoras plataformas flotantes. Esto fue un hito en la pirotecnia mundial que ha permitido mejorar el diseño del castillo. A posteriori hemos sido copiados en otros castillos de países ribereños del Mediterráneo", recalca el presidente de la cofradía, Jose Pérez Gorgoll.

   "Ahora --prosigue-- hemos hecho unas mejoras muy importantes para adecuar los lanzamientos de material pirotécnico y ello ha sido gracias a un trabajo pormenorizado de los nuevos cofrades, de la nueva savia".

   Los artífices Estas tareas han sido desarrolladas con mucho ímpetu, por su complejidad, por los cofrades responsables de ingeniería, logística y desarrollo sostenible: José Salvador Alvado (Estudiant), Vicente Cantó, Antonio Llinares (Sariero) y José Llopis (Garrot).

   La inversión en esta materia ha sido de 20.000 euros. Las 5 plataformas dobles alcanzan los 8 m x 5m y ocupan una superficie de 40 metros cuadrados. Pesan 8.500 kg en vacío cada una y están ubicadas a 250 metros de la costa y separadas entre sí a 100 metros de distancia.

   Los tres pantalanes dobles miden 3 metros x 10 metros y una superficie de 30 metros cuadrados. Su peso en vacío es de 1.500 kilos y están separados entre sí a 100 metros de distancia.