Sucesos.- La Policía detiene a un hombre que tenía un taller para elaborar ropa de marca en un domicilio

VALENCIA 9 Jun. (EUROPA PRESS) -

Agentes de la Policía Nacional detuvieron sobre las 20.20 horas del pasado jueves en Valencia a un hombre de 32 años como presunto autor de un delito contra la propiedad industrial, ya que había organizado un taller de elaboración y almacén de prendas de ropa de conocidas marcas como Gucci, Dolce Gabanna, Dior, Diesel o Emporio Armani, en un piso que tenía alquilado en la calle Jumilla de la ciudad, según informó la Jefatura Superior de Policía de Valencia en un comunicado.

El día anterior a la detención, los agentes intervinieron en el domicilio, 50 suéters, 43 pantalones, 10 rebecas, 48 camisetas, dos sudaderas y otras 50 prendas sin embalar. También se incautaron de unos 300 moldes de varias marcas, 21 fotolitos o cuadros de serigrafías, una máquina decapadora y una prensa de claro, más de 300 bolsas para embalar, más de 1.000 etiquetas de conocidas marcas, unos 2.000 remaches para pantalones, una pistola para clips para fijación de etiquetas y más de 15 de rollos de vinilo serigafriados.

Los hechos ocurrieron la tarde del martes, cuando los policías fueron requeridos para que se dirigieran a una vivienda de la calle Jumilla, ya que desde hacia varios días la puerta y las ventanas de la vivienda permanecían abiertas, aunque, una vez allí, no encontraron a nadie.

No obstante, vieron que en el domicilio se había establecido un taller de fabricación de prendas de ropa de marcas conocidas, por lo que los agentes se quedaron custodiando la vivienda, hasta que el miércoles, con el correspondiente mandamiento judicial, realizaron el registro en el que intervinieron las prendas de ropa y demás efectos. En la inspección de la vivienda, los policías observaron como en las diferentes habitaciones del piso, se había distribuido perfectamente la cadena de confección del género.

Los policías continuaron investigando hasta que localizaron y detuvieron al presunto autor, un hombre marroquí de 32 años, que no tenía antecedentes policiales, y que pasó a disposición del juzgado de instrucción número seis de Valencia. Asimismo, los agentes siguen las averiguaciones para calcular el beneficio económico que ha obtenido el supuesto culpable.