Sam Mendes narra la historia de un grupo de marines en la Guerra del Golfo en 'Jarhead. El infierno espera'

Actualizado: miércoles, 4 enero 2006 12:07


MADRID, 4 Ene. (EUROPA PRESS) -

Después del éxito de 'American beauty' (ganadora de un Globo de Oro y cinco Oscar) y 'Camino a la perdición', que protagonizaron Tom Hanks y Paul Newman, el director Sam Mendes cambia de registro y cuenta la historia de un grupo de marines del ejército de EE UU durante la Guerra del Golfo en 'Jarhead. El infierno espera', basada en un libro de memorias de Anthony Swofford. La película, en la que los actores Jake Gyllenhaal y Peter Sarsgaard dan vida a dos francotiradores de elite, se estrena mañana.

Jake Gyllenhaal y Peter Sarsgaard estuvieron en Madrid promocionando esta película. Los dos actores hablaron de la Guerra del Golfo y el actual conflicto en Irak, además de la política de Bush y, como no podía ser menos de sus trayectorias profesionales y, concretamente, de su participación en la cinta de Mendes.

"La película no elogia ni critica al cuerpo de marines ni sirve para reclutar más marines. Mendes la define muy bien: es un ejercicio de malabarismo sobre la cabeza de un alfiler", dijo hoy Sarsgaard, que da vida en la gran pantalla a Allen Troy, francotirador compañero de Anthony Swofford (Gyllenhaal).

Según Gyllenhaal, lo interesante de 'Jarhead' es el enfoque que da de la Guerra del Golfo. "Las guerras ahora son diferentes, es la guerra contra el terror, una guerra psicológica", dijo el actor, a lo que su compañero de reparto anotó que el filme no es sólo un retrato de lo que pasó.

SUEÑOS Y MEMORIA

"El libro está escrito desde los sueños y la memoria. Saca lo inconsciente de los sueños y sirve para interpretar la realidad", agregó el actor, destacando que con el 11-S se produjo en EE UU una actitud de patriotismo y nadie hablaba en contra de la guerra en Irak, hasta que ha pasado el tiempo. "La gente ha perdido el miedo a hablar con valentía", subrayó Sarsgaard, quien siempre estuvo en contra de la invasión de Irak.

Según dijo Gyllenhaal, EE UU está pasando por "un momento triste", en el que "los políticos hacen trabajo de actores y los actores de políticos". "Al principio de la guerra de Irak me hacía muchas preguntas, buscaba razones y el porqué. Ahora sigo sin respuestas", declaró. "Vivimos en la cultura del miedo", apuntó.

Según declaraciones del propio Mendes, en 'Jerhead' ha intentado recoger "los sentimientos, las impresiones, la versión subjetiva de los acontecimientos para ofrecer una visión diferente de la guerra".

ENTREGADOS A LA CAUSA

Mendes se interesó por mostrar en el filme "la guerra desde el punto de vista del soldado". Quería mostrar una guerra que sólo se había visto desde el aire, desde el punto de vista de la infantería.

"En lugar de la clásica imagen de héroes limpios y bien uniformados entregados a la causa, muestra reclutas sudando en el desierto, apasionados por el rock y una creciente e insatisfecha sed de sangre", afirma el cineasta.

El rodaje de 'Jarhead' estuvo precedido por tres semanas de ensayos y los trece actores que conforman el pelotón pasaron por un entrenamiento básico de cuatro días en la base aérea de George. Los decorados se hicieron en los platós de Universal Studios. Las escenas de desierto se rodaron en el de Glamis, en California.