SAN SEBASTIÁN, 26 Sep. (EUROPA PRESS) -
Los Premios Europeos de Patrimonio han reconocido el proyecto de rehabilitación del puente de la localidad guipuzcoana de Deba, en Venecia (Italia).
La diputada foral de Cultura de Gipuzkoa, Goizane Álvarez, ha dado cuenta en comunicado de que este jueves la rehabilitación del puente de Deba será reconocida en los Premios Europa Nostra 2023, los galardones "más prestigiosos en el ámbito de patrimonio cultural de la Unión Europea".
Estos premios son otorgados por la Comisión Europea y Europa Nostra y, entre sus 30 reconocimientos, sólo ha sido reconocida otra intervención en España, la del Monasterio de San Pedro de Eslonza, en Gradefes. Ambos proyectos serán homenajeados en la Ceremonia de los Premios Europeos de Patrimonio, en el Palazzo del Cinema en Venecia.
Álvarez ha dicho que es "motivo de orgullo que este proyecto haya obtenido el máximo de los honores que en el ámbito del patrimonio", tras un proyecto de reconstrucción artesanal con técnicas del siglo XIX y tecnología "vanguardista".
La diputada ha señalado que la actuación fue "un desafío", tras detectarse en julio de 2018, que los pilares del puente de piedra que une Deba y Mutriku, construido en 1866, habían cedido. Además, ha explicado que la rehabilitación del puente no era competencia de la Diputación de Gipuzkoa; pero al ser un elemento "protegido", dentro del conjunto monumental del Camino de Santiago, existía la "obligación moral" de actuar, porque es una parte "fundamental" de la identidad y la diversidad cultural de una sociedad y desempeña un papel "importante" en la formación de la memoria colectiva.
También ha señalado que fue una decisión "valiente", porque era una infraestructura que era "casi una ruina" y se decidió actuar en una obra, que ha supuesto "un reto para los técnicos de un proyecto", al que ha querido agradecer y felicitar su trabajo.
La Comisión Europea y la Europa Nostra calificaron el proyecto, que se llevó a cabo entre 2018 y 2022, como "un magnífico ejemplo de ingeniería civil". Álvarez ha recordado que los trabajos se prolongaron durante "casi cuatro años", dada la "complejidad técnica y económica".
