Los empresarios rechazan hacer concesiones y la parte social pide avances para no tomar "otras medidas de presión"
VIGO, 8 May. (EUROPA PRESS) -
La patronal del Metal de la provincia de Pontevedra aceptó hoy reunirse el próximo lunes con los sindicatos --después de no haberse presentado en los últimos dos encuentros previstos-- para "salir del punto de atasco" en la negociación del convenio colectivo, aunque se mostró reticente a ceder en sus planteamientos.
En declaraciones a los medios tras mantener un encuentro con la delegada territorial de la Xunta, Lucía Molares; el director xeral de Relacións Laborais, Odilo Martiñá; y el jefe de la Inspección de Trabajo, José María Casas de Ron; el portavoz de la Asociación de Industriales Metalúrgicos (Asime), Javier Martínez, confirmó que acudirán a la reunión del lunes, a las 12.30 horas, aunque recordó que la posición de la patronal "es muy clara y más que razonable".
A ese respecto, apuntó que los empresarios "ya movieron todas las fichas que había que mover" y reconoció que será "difícil" salir del actual conflicto que afecta al sector. "La patronal siempre se movió, pero hay que entender que la situación es muy complicada", aseveró, al tiempo que recordó que la crisis ha hecho que "sigan cerrando empresas" y que "donde no hay no se puede sacar".
En cuanto a las reclamaciones de los sindicatos, Javier Martínez precisó que la parte social "ha abandonado" las demandas que inicialmente plantearon en una plataforma común y que sólo insisten en pedir el seis por ciento de aumento salarial "en los medios de comunicación".
El portavoz de Asime recordó que la patronal ya rebajó sus pretensiones en la vigencia del nuevo convenio, pasando de tres a dos años, y que ofrecen a los trabajadores mantener su poder adquisitivo". "Todo el mundo sabe lo que es mantener el poder adquisitivo", apuntó y señaló que los sindicatos "no dicen ni sí ni no" a esta oferta.
VALORACIÓN DE SINDICATOS
Por su parte, los sindicatos recordaron que ellos han estado "siempre dispuestos" al diálogo y que mantuvieron el conflicto durante 20 días "con baja intensidad". De hecho, el portavoz de CC.OO., Ramón Sarmiento, advirtió de que no están "dispuestos a admitir reproches" en ese sentido, y recordó que, si no ha habido reunión antes con la patronal "no ha sido por culpa de los sindicatos".
El portavoz de UGT, Diego Atanes, afirmó que los representantes de los trabajadores acudirán a la reunión del lunes con la intención de "llegar a un acuerdo", y pidió a la Administración que mantenga su papel mediador.
El responsable de CIG-Metal, Miguel Anxo Malvido, reiteró la "total disposición" de las tres centrales a sentarse en la mesa de negociación y advirtió de que, si no se dan avances en el encuentro del lunes, "habrá que tomar otras medidas de presión".
Asimismo, precisó que los sindicatos "no se movieron" en cuanto a sus reclamaciones y señaló que estarán dispuestos a modificar su postura si la patronal hace una oferta "con la que se pueda empezar a negociar".
