Apuestan por las energías renovables, la eliminación de especies exóticas invasoras y el fomento del empleo verde
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 16 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Xunta busca captar fondos europeos de recuperación por la COVID-19 con 10 proyectos de conservación de espacios naturales protegidos cuya inversión suma 122 millones de euros y que han sido trasladados al Gobierno central durante los últimos meses.
Durante una rueda de prensa telemática celebrada este martes, la conselleira de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda, Ángeles Vázquez, ha explicado que esas iniciativas de conservación y restauración de la biodiversidad cumplen las directrices de la Unión Europea (UE) y el Ejecutivo central para acceder a los fondos Next Generation y se alinean con el Pacto Verde. Así, ha señalado que se aspira a reforzar "la Galicia verde" y "azul".
Para ello, Ángeles Vázquez ha resaltado que resultan fundamentales el empleo de energías renovables, la reducción de emisiones contaminantes, la protección de la Red Natura 2000, la conservación de los parques, ríos y humedales y la recuperación de especies y hábitats. Además, ha apuntado que los proyectos contemplan la eliminación de especies exóticas invasoras, la recuperación de espacios afectados por incendios forestales y una apuesta por el empleo verde.
La primera de las actuaciones previstas incluye la recuperación de especies autóctonas, la eliminación de las foráneas y la instalación de nuevos sistemas de abastecimiento y depuración de aguas en el Parque Nacional das Illas Atlánticas. Además, busca dotar de suministro eléctrico de modo ininterrumpido a las Illas Cíes y Ons y que la totalidad de la energía del parque provenga de fuentes renovables, así como la puesta en marcha de un campo de trabajo en el mismo.
Asimismo, se ha diseñado un proyecto de recuperación de humedales y ríos que incluye la restauración de ecosistemas propios, la regeneración de márgenes fluviales y la eliminación de obstáculos en los cauces. También se enfoca en la conservación de la biodiversidad mediante la eliminación de especies exóticas invasoras y el incremento de otras como el salmón, la anguila y la lamprea. Esta actuación se centrará en los entornos de los ríos Ulla, Eo, Landro y Sor.
RESTAURACIÓN DE ECOSISTEMAS
La tercera propuesta, que se prevé que se lleve a cabo en 800 hectáreas, se enfoca en la restauración de ecosistemas y contempla la adquisición de terrenos para mejorar su gestión, la eliminación de especies invasoras, la recuperación de las autóctonas, la mejora de infraestructuras y el impulso de la utilización de energías renovables en centros de visitantes.
En espacios de la Red Natura 2000 también se ha proyectado la eliminación de especies exóticas invasoras en la flora, como la cortaderia selloana o hierba de las Pampas, la mimosa y la uncaria tomentosa, conocida como uña de gato; y la fauna, como el cangrejo americano. Estas áreas serán objeto de trabajos para mejorar la población de especies amenazadas y compatibilizar el turismo y la protección medioambiental.
Adicionalmente, se han diseñado intervenciones para zonas de la Red Natura 2000 afectadas por incendios forestales y la retirada de restos de las mismas, así como la recuperación de hábitats. Esta actuación se centrará en mayor medida en O Xurés, el Macizo Central, las Fragas do Eume y O Courel.
CONECTIVIDAD DE ÁREAS DE MONTAÑA
Los proyectos presentados por la Xunta también buscan intervenir en 1.000 hectáreas para poner en marcha corredores ecológicos e impulsar la conectividad de Os Ancares y O Courel y el Macizo Central y O Xurés, así como de espacios fluviales y humedales con áreas de montaña. Además, la conselleira ha indicado que se aspira a diseñar un mapa de hábitats de Galicia.
Finalmente, Ángeles Vázquez ha precisado que entre las propuestas presentadas se incluye una articulada junto a Asturias para la recuperación de hábitats en el entorno del río Eo, la conservación de lagunas y la restauración del corredor fluvial.
La conselleira de Medio Ambiente ha detallado que Galicia ha incluido un último proyecto diseñado junto a Asturias, Cantabria y País Vasco para la eliminación de la especie invasora conocida como hierba de las Pampas en zonas del litoral de estas comunidades, como acantilados y dunas.
