PALMA, 19 Feb. (EUROPA PRESS) -
El equipo técnico de Aranzadi está a punto de concluir las tareas de excavación y exhumación que llevan a cabo desde el pasado 8 de febrero en el espacio central del cementerio de Porreres, bajo un bloque de nichos y capillas.
Este viernes se ha retirado el hormigón y el cemento que afectaban a las fosas 12 y 13 y se ha continuado avanzando en la exhumación de los restos localizados, unas tareas que el equipo prevé finalizar este fin de semana.
A partir de entonces, el trabajo se centralizará en el laboratorio de campo instalado a pocos metros de la zona de fosas. Allí se llevarán a cabo los análisis antropológicos que permitirán realizar estimaciones de sexo, edad y estatura de los restos de las víctimas recuperadas, así como concretar el número exacto de individuos localizados, que se calcula que estará entre la veintena y treintena de víctimas.
El trabajo de laboratorio también intentará determinar la causa de la muerte a través de las heridas que presentan los restos óseos, una tarea que llevará a cabo un equipo de antropólogos y médicos forenses de Aranzadi.
Los análisis antropológicos servirán también de orientación para el posterior análisis de ADN, para el que se usarán las muestras recogidas en 2016 y, si fuera necesario, se tomarían otras nuevas.
Las tareas de excavación y exhumación que se están llevando a cabo en el cementerio municipal de Porreres forman parte del Plan de Fosas 2018-2019 del Govern, adjudicado a la Sociedad de Ciencias Aranzadi. La intervención es la continuación de la que realizó en noviembre de 2016, que permitió exhumar 49 cuerpos de víctimas, de las cuales 14 fueron identificadas y sus restos se devolvieron a sus familias.
