También dice que sospechó que alguna operación de las cuentas de la familia Gijón podía ser "ficticia"
PALMA, 29 Jun. (EUROPA PRESS) -
Un miembro del Grupo de Blanqueo de Capitales ha señalado este jueves, en calidad de testigo, que entre el subinspector del Grupo, Miguel Ángel Blanco, y el policía Iván Bandera había "discrepancias" a raíz de la investigación del caso de la Madame.
Cabe recordar, sobre este último, que se trataba de una testigo protegida que denunció haber sido secuestrada por dos inspectores para declarar en contra de Cursach, cuya investigación se archivó. "Ese fue un punto de inflexión y ahí sí que hubo ciertas discrepancias", ha reiterado en la Sala.
Además, el testigo, preguntado al respecto, ha señalado que el inspector jefe del Grupo, José Luis García Reguera, le reconoció que "no estaba a gusto" con el fiscal Miguel Ángel Subirán.
En relación al expolítico Álvaro Gijón y su familia, el policía ha contado al Tribunal que él se encargó de analizar las cuentas bancarias, centrándose en las de la madre y en una sociedad. La conclusión a la que llegó, ha dicho, venía relacionada con el reconocimiento de deuda.
"Ese reconocimiento de deuda podía ser ficticio, porque del análisis no se desprendían datos que hicieran pensar que ella hubiera hecho esas aportaciones de capital y la sociedad tampoco tenía capacidad de devolver ese préstamo", ha incidido. En concreto, del reconocimiento se pagaron unos 4.500 euros, mientras que el reconocimiento de deuda era de unos 225.000, según ha revelado el agente.
También ha descrito la entrada y registro practicada en el domicilio del hermano de Álvaro Gijón, que se desarrolló sin "ninguna incidencia". "Buscamos documentación y todo lo que estuviera relacionado. No se hizo una búsqueda exhaustiva de dinero", ha recalcado el policía.
Preguntado, asimismo, por la relación de Bandera con los periodistas, ha afirmado que sí tenía "contactos" y ha hablado de "saludos protocolarios" entre el acusado y los periodistas.
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