Numerosas entidades dan apoyo a los cuatro mallorquines que serán juzgados por los incidentes de la Diada de 2010

Actualizado: viernes, 8 junio 2012 15:02

La Fiscalía reclama un total de nueve años de prisión para los acusados


PALMA DE MALLORCA, 8 Jun. (EUROPA PRESS) -

Representantes de numerosos colectivos y organizaciones de Mallorca y de los Països Catalans han mostrado su apoyo a los cuatro mallorquines que, a partir del próximo día 18, serán juzgados por los incidentes acaecidos durante la Diada de Mallorca de 2010, en el marco de los cuales se les acusa de haber quemado una bandera española durante una manifestación en favor de la independencia y de haber arrojado sillas y mesas contra varios agentes de policía cuando éstos intentaban poner orden.

En concreto, representantes de la Obra Cultural Balear (OCB) como Damià Pons y Marisa Cerdó (OCB), del Grupo Balear de Ornitología (GOB) como Margalida Ramis (GOB), de CGT y del STEI-i, entre otros, han expresado su respaldo a la absolución de los acusados en un vídeo publicat per la organización Endavant (OSAN). Asimismo, este sábado, el músico Biel Majoral actuará en el Teatre del Mar en un acto enmarcado en la campaña de apoyo.

Ante las acusaciones que pesan sobre los inculpados, desde Endavant defienden que los hechos se produjeron después de que la Policía y "un grupo de fascistas atacasen la manifestación de de la Esquerra Independentista". De hecho, aseveran que días más tarde cuatro de los manifestantes, "comprometidos en la lucha por la independencia y el socialismo en los Països Catalans" y dos de ellos militantes de la entidad independentista, fueron detenidos y acusados, "en un expediente lleno de mentiras y contradicciones, de participar en estos incidentes".

Sin embargo, la Fiscalía reclama para los cuatro acusados, defendidos por el letrado Josep de Luis, un total de nueve años de cárcel. En concreto, cada uno de ellos se enfrenta a una petición de dos años de prisión por un delito de atentado y un año de prisión para uno de ellos por lesiones, mientras que también solicita para cada uno 1.800 euros de multa por un delito de ultraje a la bandera y otros 720 euros por una falta de lesiones para dos de ellos.

Y es que el Ministerio Público explica que los cuatro acusados estaban secundando la manifestación convocada por la Plataforma 31-D cuando al llegar a la intersección entre las calles Oms y Missió algunos de los participantes, cuyos rostros taparon con capuchas, procedieron a prender fuego a la enseña rojigualda, lo que según postula la acusación pública fue planeado con anterioridad y concertado con los acusados "a modo de símbolo independentista".

Tal y como prosigue en su escrito de calificación, al que tuvo acceso Europa Press, los inculpados, David P.M., Roberto C.C., Silvia M.E. y Guillem Francesc C.M., para lograr que prosiguiera la quema y que los agentes que formaban el dispositivo de seguridad no pudieran evitar la acción, colocaron diversas sillas y mesas entre éstos y los manifestantes, diciéndoles que "no pasarían hasta que la bandera no estuviera del todo quemada".

Sin embargo, tal y como sostiene la Fiscalía, cuando los efectivos policiales consiguieron acceder al lugar de los hechos, un grupo de participantes en la marcha, entre los que se encontraban David P.M. y Guillem C.M., comenzaron a lanzarles sillas y mesas, impactando sobre los agentes, mientras que Roberto C.C. junto a otros manifestantes presuntamente les empujaban hacia la masa hasta provocar que cayeran al suelo.

En ese instante, la acusación señala que cuando un viandante intentó ayudar a los agentes que estaban en tierra, Silvia M.E. le golpeó en la cabeza con una silla, impacto que iba destinado a uno de los efectivos policiales. Los golpes asestados con sillas y mesas provocaron tanto a los dos agentes como al transeúnte lesiones de diversa consideración por las que la acusación pide un total de 5.100 euros en indemnizaciones más lo que resulte de valorar los desperfectos causados en uno de los uniformes.

Más de 1.500 personas participaron en la manifestación convocada, coincidiendo con la conmemoración de la Diada de Mallorca, por la plataforma 31-D, integrada en concreto por Asema, Bloc, Comité de solidaridad con Euskal-herria, Grup Blanquerna, ERC, Entesa per Mallorca, PSM, Lobby per la Independència, Joventuts de ERC, JEN-PSM, UOB y STEI. Una marcha que fue encabezada por una pancarta que rezaba el lema 'Som una nació. Autodeterminació'.