PALMA DE MALLORCA, 3 Jul. (EUROPA PRESS) -
El PSIB ha exigido al Govern y al Consell de Mallorca que tomen "medidas concretas e inmediatas contra el sexismo como estrategia comercial en Mallorca", a raíz de las informaciones y los vídeos que circulan en la red sobre los locales de Mallorca que impulsan concursos de felaciones a cambio de alcohol.
Según ha destacado en un comunicado la secretaria general de los Socialistas de Mallorca, Silvia Cano, "es inadmisible que los establecimientos turísticos utilicen el sexo y una imagen denigrante para las mujeres como un reclamo para sacar el máximo rédito económico de su negocio".
Por ello, Cano reclama a la presidenta del Consell de Mallorca, Maria Salom, que impulse un Plan de Igualdad desde la institución "que ha guardado en el cajón durante toda la legislatura". En este sentido, la socialista insiste en que "necesitamos de empresas socialmente responsables e instituciones fuertes que garanticen la igualdad y dignidad de las personas, y Salom no puede seguir inmóvil en esta situación".
En cuanto al Govern, ha anunciado que la formación pedirá a la consellera de Familia y Servicios Sociales, Sandra Fernández, la puesta en marcha de una propuesta que proponga "la eliminación de estas prácticas en el ocio turístico de las Islas para que atentan contra la dignidad de las mujeres además de suponer un delito contra la salud pública".
Además, la secretaria general de los Socialistas de Mallorca propone la intervención de la Conselleria de Salud en este asunto, "porque son unos hechos que favorecen la transmisión de enfermedades sexuales, algunas potencialmente graves".
De hecho, esta misma semana la Federación Socialista de Mallorca ya ha denunciado ante l'Institut Balear de la Dona un cartel sexista situado en un hotel de Calvià y han obtenido "una tímida respuesta". "Es necesaria una colaboración y apuesta decidida entre todas las instituciones para frenar estas iniciativas sexistas y denigrantes hacia las mujeres", ha destacado.
Finalmente, el PSIB ha solicitado la clausura de los locales que potencian estas prácticas que "evidencian la falta de control por parte del Ayuntamiento de Calvià", ha concluido Cano.
