NUEVA YORK, 3 Ago. (EUROPA PRESS) -
El representante especial de la ONU para Afganistán, Kai Eide, expresó hoy su preocupación por las condiciones de los centros de detención en ese país y subrayó la urgencia de que los prisioneros afganos sean tratados según lo estipulan las leyes internacionales.
En una conferencia de prensa ofrecida en Kabul, Eide advirtió de que de no respetarse los estándares de estas leyes, los detenidos podrían adoptar posturas radicales, lo que afectaría al país. El enviado explicó que tras visitar uno de los centros de detención en la capital afgana pudo observar la necesidad de mejorar las instalaciones, por lo que instó a la comunidad de donantes y al Gobierno a asignar recursos adicionales para este propósito.
"Es importante que las familias de los detenidos reciban toda la información que sea posible sobre el paradero y la situación de sus parientes presos", recalcó. Subrayó, asimismo, la necesidad de aumentar la capacidad del sistema de justicia para garantizar que los detenidos no permanezcan cautivos sin el debido proceso legal. Eide informó por último de que próximamente visitará más puntos de detención, incluida la prisión de Bagram, la principal base militar de Estados Unidos.
