Amano se congratula del respaldo internacional a su plan de seguridad nuclear

Actualizado: viernes, 24 junio 2011 17:35


VIENA, 24 Jun. (Reuters/EP) -

El jefe de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA), Yukiya Amano, asegura que su plan para reforzar las medidas de seguridad en las centrales nucleares de todo el mundo cuenta con el amplio respaldo de la comunidad internacional, de la que espera que incremente su contribución económica para llevar su propósito a buen término y evitar así que se repita una catástrofe como la de Fukushima, en Japón.

"Estoy sorprendido por el grado de consenso alcanzado en los aspectos fundamentales y me siento muy animado por el amplio respaldo del que han gozado mis propuestas", aseguró Amano durante la cumbre de seguridad nuclear que se lleva celebrando en Viena desde el pasado lunes y que termina hoy.

El objetivo del encuentro, en el que han participado representantes de los 151 estados miembros de la agencia nuclear de Naciones Unidas, ha consistido en la presentación de medidas adicionales para reforzar los mecanismos de supervisión del estado de los reactores nucleares en un plazo máximo de 18 meses.

También se ha pedido desde la AIEA un aumento de la cooperación internacional a la hora de revisar sistemas de control nuclear entre países, pero los diplomáticos consultados dudan de que esta propuesta goce del mismo grado de consenso, ya que muchos estados miembros consideran su política nuclear un asunto estrictamente interno y se niegan a ser objeto de estudio por expertos de otros países.

Con todo, altos representantes que han participado en la reunión se han congratulado del éxito alcanzado. "Veo que se ha alcanzdo un consenso muy poderoso entre países, operadores y autoridades de seguridad", hizo notar el presidente de la Autoridad de Seguridad Nuclear de Francia, Andre-Claude Lacoste. "Fue mejor de lo que esperado", remachó.

En última instancia, Amano expresó su optimismo sobre la posibilidad de que los países incrementen su contribución económica para reforzar las medidas de seguridad en sus centrales ante catástrofes naturales tras el desastre de la planta de Fukushima-1, destrozada por el terremoto y posterior tsunami del pasado mes de marzo. Con todo, Amano recordó que, a día de hoy, "todavía no existen los recursos económicos suficientes para financiar las actividades derivadas de las lecciones impartidas por Fukushima".