MADRID, 15 May. (EUROPA PRESS) -
El relator especial de la ONU para la situación de los Derechos Humanos en los Territorios Palestinos ocupados, Michael Lynk, ha denunciado el "flagrante uso excesivo de la fuerza" por parte de Israel contra manifestantes en la Franja de Gaza y ha advertido de que las acciones podrían equivaler a un crimen de guerra.
Lynk ha considerado injustificado el uso de fuego real por parte de las fuerzas israelíes --"un ojo por una pestaña", ha esgrimido-- y ha exigido que los responsables de dar las órdenes rindan cuentas ante la Justicia, en la medida en que al menos 60 palestinos perdieron la vida y más de 2.700 resultaron heridas.
El relator ha recordado que el Derecho Internacional establece "prohibiciones estrictas" para el uso de la fuerza, de tal forma que la utilización de equipos letales solo es el último recurso "en caso de una amenaza inminente para la vida o de una amenaza de heridas graves".
"No hay pruebas evidentes de que el uso de cometas incendiadas, el lanzamiento de piedras o cócteles molotov u otras acciones supuestamente perpetradas por un pequeño número de manifestantes hayan representado una amenaza de muerte que justifique el uso de la fuerza por parte del Ejército israelí", ha apostillado.
En este sentido, ha advertido de que el fallecimiento de civiles sin tener en cuenta las reglas establecidas, y máxime en "un contexto de ocupación", "podría equivaler a muertes intencionadas" y, por extensión, suponer un "grave" incumplimiento del Cuarto Convenio de Ginebra --relativo a la protección de civiles-- y constituir un crimen de guerra.
Lynk ha dirigido su mensaje también a la comunidad internacional, para reclamar, "a través de Naciones Unidas", una investigación "independiente e imparcial" sobre los hechos acaecidos el lunes en la Franja de Gaza, así como sobre la represión que se viene repitiendo en este territorio desde las movilizaciones del 30 de marzo.
"La impunidad por estas acciones no es una opción. Que haya justicia para las víctimas debe ser una prioridad para la comunidad internacional", ha reclamado el relator.
