MADRID, 24 Jun. (EUROPA PRESS) -
El partido gobernante de Georgia ha anunciado que promoverá un cambio del sistema electoral para las próximas elecciones generales, previstas para 2020, en un aparente avance hacia un sistema político más proporcional con el que aspira a contener la ola de protestas originada la semana pasada.
El líder de Sueño Georgiano, Bidzina Ivanishvili, ha anunciado este lunes que la reforma plantea eliminar el umbral mínimo de votos para obtener representación parlamentaria --situado en el 5 por ciento-- y establecer un sistema proporcional, una de las reivindicaciones de los manifestantes.
El actual sistema mixto prácticamente garantizaría a la formación gobernante hacerse con la mayoría de los distritos y, por tanto, hacerse de nuevo con la mayoría parlamentaria. El propio Ivanishvili ha reconocido la necesidad de cambiar las reglas actuales: "Podría servir a nuestros intereses, pero no responde a los retos a los que se enfrenta el país".
Georgia aspira de esta forma a dar pasos hacia un contexto político más "plural", con el objetivo de que el Parlamento surgido de los comicios de 2020 "represente a todos los actores políticos y a todo el potencial intelectual", ha añadido Ivanishvili en una comparecencia ante los medios, según informa la agencia Interpress.
La visita de una delegación rusa al Parlamento georgiano motivó la semana pasada unas movilizaciones que se saldaron con más de 200 heridos. El presidente de la Cámara, Irakli Kobakhidze, dimitió tras las protestas, pero los manifestantes mantienen sus reivindicaciones y piden nuevas salidas de altos cargos.
Las protestas han seguido este lunes ante el Ministerio del Interior, donde un grupo ha reclamado la dimisión del jefe de este Departamento, Giorgi Gajaria. También han pedido la liberación de las 300 personas que seguirían detenidas por su participación en las protestas.
El responsable de Sueño Georgiano ha advertido de que debe haber "consecuencias legales" por los disturbios. "Los que han organizado actos de violencia masiva y se han aprovechado de su poder deben ser castigados", ha subrayado Ivanishvili, que ha llamado a la depuración de responsabilidades en todos los bandos.
La Fiscalía ha anunciado este lunes la apertura de una investigación sobre la labor de las fuerzas de seguridad, a las que los manifestantes han acusado de actuar con una violencia excesiva durante las movilizaciones convocadas el 20 y el 21 de junio.
"HISTERIA RUSÓFOBA"
El papel de Rusia es un motivo recurrente de polémica en Georgia, donde aún está reciente el conflicto vivido en 2018 por el control de las regiones separatistas de Abjazia y Osetia del Sur. Moscú reconoce como independientes a ambos territorios, aunque mantiene 'de facto' su control sobre ellos.
Las autoridades rusas prohibirán los vuelos comerciales hacia Georgia a partir del 8 de julio y ya han amenazado con límites a la importación de vinos, supuestamente por una merma de la calidad.
El portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov, ha lamentado la "histeria rusófoba" que ha imperado en Georgia, "azuzada por elementos radicales", y ha atribuido la última ola de protestas a una "crisis política interna", según la agencia de noticias Sputnik.
